Lady Wilson nunca había pensado que sería abofeteada por una desconocida después de todo un duro día de trabajo y dificultades.

Después de que la señora la abofeteó, continuó regañándola: "¡M*ldita anciana! ¿Cómo te atreves a fingir que eres residente en Thompson Primero cuando ahora estás comiendo asquerosas sobras? ¡Mujer loca!".

Luego le gritó a un guardia de seguridad que estaba cerca: "¡Ven aquí ahora mismo! ¿No estás cegado? Me he gastado veinte millones por una casa aquí y ¿esta es la actitud que nos muestras?".

El guardia de seguridad también se sentía nervioso.

Lady Wilson parecía demacrada y cansada, a diferencia de la típica anciana adinerada.

Además, las sobras como bollos al vapor, arroz y restos de platos desordenados dentro de las cuatro grandes bolsas de plástico eran totalmente incoherentes con las características de los residentes de Thompson Primero.

Entonces se apresuró a decirle a la anciana: "Lo siento, anciana. Esta es una zona residencial privada, por lo q