Capítulo 258Axel Vega LazcanoLeón, Guanajuato, MéxicoIvanna estaba muy alterada y yo no sabía ni cómo hacer que se calmara, Amaia me miraba aún muy sacada de onda y yo lamentaba más que nadie que Ivanna, llegara así y nos sacara de un momento especial, pero ni hablar bajaría a ver el daño en la camioneta del despacho de mi amiga, Me recompuse la ropa y bajé con Ivanna, Amaia me esperó en el departamento y al ver la camioneta llena de grafiti con palabras obscenas, Ivanna se volvió loca de ira.–Lo siento, Axel. Cecilia colmó mi límite y siento que no me contendré de matarla, la voy a buscar y le torceré el cuello – Dijo Ivanna – Estoy harta de esto, para ella yo también soy una puta que se ha revolcado contigo.–No, Ivanna, debes de calmarte. Por favor, tienes que ser razonable.Tenemos que acabar con Cecilia, pero no de esa manera, tenemos que hacerlo por la vía legal, ya con el testimonio de los amantes que vayan saliendo tendremos suficiente, yo le pago a la güera los daños mate
Capítulo 259Amaia Domínguez GarcíaLeón, Guanajuato, MéxicoAxel parecía que estaba poseído por una entidad o yo no sé lo que estaba pasando con él, ahora se había roto el momento que teníamos hace rato en el que Axel era delicado y tierno y se había vuelto un desconsiderado conmigo. Él me miraba como si me odiara en el momento que me estaba sometiendo y eso se estaba saliendo de control.Yo quería que siguiéramos en lo que estábamos, eso era cierto, pero no así de esa cruel manera y él, como si me leyera la mente, me advirtió. Yo no podía hacer nada, ni siquiera podía hablar, solo llorar por cómo se estaba comportando, era un salvaje, así no era como yo quería que continuáramos.–Cállate Amaia, deja de llorar – Me ordenó – Disfruta de esto, que al fin y al cabo esto era lo que querías.Yo no le podía responder, tenía tapada mi boca con una de sus corbatas. Axel no tenía piedad y realmente sentía que ya la corbata me estaba lastimando. A él parecía no importarle nada y eso me daba mi
Capítulo 260Amaia Domínguez GarcíaLeón, Guanajuato, MéxicoAxel estaba siendo muy seguro de él mismo, con eso que me estaba diciendo ¿Quién se creía que es? Estaba muy enojada porque, aunque bien es cierto que la entrega para nada fue desagradable, me había dolido demasiado esa crueldad que demostró y por eso quería irme a donde no estuviera con él, pues en ese momento yo no lo soportaba.–Me vale lo que tú hayas sentido – Le grité – Me quiero ir a donde no te vea, eres un insensible, un desgraciado y un mierda, que parece que has disfrutado el haberme tomado de esa fea manera.Se atrevía a decir que lo había disfrutado, que me vio llena de angustia y le había valido mi sufrimiento. Eso no es querer, si dice que me ama no se lo voy a creer nunca. En estos momentos no lo quiero ni ver cerca de mí. Me ha dolido su forma de tomarme tan bruscamente, como si yo no valiera nada para él.–Pues sí, la verdad lo disfruté demasiado – Me dijo con un ego inmenso – Me encantó verte así cariño, p
Capítulo 261Axel Vega LazcanoLeón, Guanajuato, MéxicoEstaba afuera de la recámara de la güera, escuchando por un buen rato el llanto de Amaia, no podía creer todo lo que fui capaz de hacerle y estaba enojado por todo, por la actitud de ella y de Ivanna, por las estupideces de Cecilia que no tenía que ir o, mejor dicho, que mandar a alguien a vandalizar uno de los vehículos del despacho de la güera y conmigo mismo, era cierto que Amaia es una chica mal educada y malcriada acostumbrada a hacer siempre lo que quiere, pero yo me pasé de la raya.Metí la llave para poder abrir la puerta de la recámara de Ivanna, empujé, pero la puerta estaba atorada con algo. No me permitía entrar, de seguro le puso algo pesado, necesitaba hablar con ella de lo sucedido, me tenía que comprender, pues solo quería que ella obedeciera.–Amaia, cariño. No puedes quedarte ahí toda la vida – Le dije – Por favor, vamos a hablar. Ábreme la puerta, ambos nos merecemos una plática, te amo.Tenemos que solucionar
Capítulo 262Axel Vega LazcanoLeón, Guanajuato, MéxicoLa güera me miraba preocupada y no era para menos la situación, mi adorada Amaia había sido cruelmente lastimada por mí y solamente porque yo no aprendo a tratarla y nunca aprenderé tal vez, llevamos tres años de relación y aun con todo y eso, yo la seguía regando con ella. Parece que soy tonto y que no me cabe en la cabeza que Amaia es una chica sensible que no merece y que no está dispuesta a aguantar estos malos tratos de mi parte.–Amigo mío, veo que no te han servido para nada estos tres años con ella – Declaró la güera – Ni como ayudarte la verdad, yo a veces también suelo ser muy fría con Cris, hasta Amaia me ha dicho que soy un témpano de hielo.A mí ella también me consideraba así, y ya con esto último nadie la va a sacar de ese pensamiento, me he pasado con ella, no debí tratarla de esa forma y me arrepiento porque se ha marchado del departamento.–Ya somos dos, güera. Sí, la he lastimado mucho y ella no va a perdonarme
Capítulo 263Amaia Domínguez GarcíaLeón, Guanajuato, MéxicoCris me invitó un café en un lugar cercano al departamento con el fin que yo me pudiera calmar, él se veía demasiado preocupado por mí y no era para menos. Me sentía muy mal por lo que estaba pasando con Axel, seguía sin creer que él me haya tratado así y me dolía demasiado que el hombre al que amo, fuera un tirano y un insensible de lo peor y lo bueno era que, al menos Cris sí me entendía.–Amaia, siento mucho todo lo que me has contado, de verdad – Cris, secó mis lágrimas con una servilleta – No quiero que llores más, no tiene caso y además no es bueno que le des el poder a Axel que te vea así, mentalízate que no le debes demostrar que tiene el poder sobre ti.Pues él había usado todo su poder para someterme, para hacer de mí lo que le diera la gana. Y es verdad lo que piensa Cris, que no le tengo que dar el poder de ver que me ha hecho daño. Pero es muy difícil para mí, no mirarlo y no sentir todo el dolor que me causó.–
Capítulo 264Amaia Domínguez GarcíaLeón, Guanajuato, MéxicoAgradecía a Cris que me tratara de animar, pero en ese momento nada lo lograba que yo me calmara. Me dolía demasiado darme cuenta de que Cris y yo teníamos demasiada mala suerte y no solo en la vida, en haber caído en las garras de dos seres que son demasiado fríos y que no tienen ni una pizca de sentimientos con los demás. Cris pidió en el lugar un poco de alcohol y yo lo aspiré buscando sentirme un poco mejor, mientras que permanecíamos ahí sentados.–Amaia, ¿Ya te sientes mejor? – Preguntó Cris muy preocupado – No quiero que te vayas a desmayar. Me preocupas mucho.Sé que me tengo que tranquilizar y ver que voy a hacer de mi vida de ahora en adelante, ya no quiero regresar al departamento, por lo menos no por el momento. No quiero volver a ver la cara de ese tirano. Prefiero quedarme en la calle o ir a ver si un amigo me tiende la mano.–Sí, Cris. Ya me siento mejor y muchas gracias por preocuparte por mí – Respondí aflig
Capítulo 265Axel Vega LazcanoLeón, Guanajuato, MéxicoAmaia se había desmayado en mis brazos y apenas la alcancé a sostener, ella estaba tan débil que se hubiera ido directo al piso, de no haberla tenido abrazada yo. La cargué en mis brazos con mucha ternura y amor y con cuidado y con ayuda de Cris, la recosté en la recámara de nuestro departamento. Ella estaba completamente suelta y esto no debía estar pasando, todo como siempre era por mi culpa de no saberme comportar como es debido con ella.–Axel, tranquilo. Amaia hace rato que nos fuimos a tomar el café, se empezó a sentir mal – Dijo Cris – Por eso tardamos un poco, no quise que saliéramos así temiendo que esto pasara y lo bueno que alcanzamos a llegar aquí al departamento.Qué bueno que habían llegado a tiempo, no sé qué hubiera hecho si Cris no hubiera venido con ella, le hubiera pasado una desgracia en la calle, no dejaré que le pase nada, yo soy el responsable de ella. Debo protegerla como no lo he estado haciendo, es mi de