Capítulo 27

KAVANLa cabeza me duele, siento que cada una de las células en mi sistema explota, tengo tantos asuntos pendientes que dejo de lado los malditos papeles que me trajo mi secretaría.—Joder.Dejo caer mi espalda en el respaldo de mi silla, hace dos horas que el vuelo de Zaid y mi madre salió, seis malditos meses en los que me habían dejado a cargo de todo, hoy sería la primera noche que pasaría por completo en la mansión Hilton y mi mente ya está llena de todas las ideas perversas que le quiero hacer a Everly. Paso dos dedos por mis labios y el recuerdo de cuando la follé por primera vez haciéndola sangrar, me golpea con fuerza.—Aquí estás.Irrumpe León haciéndome regresar a la realidad.—¿Aún no has firmado los documentos que te mandé? —inquiere sentándose frente a mí—. Joder Kavan, son importantes.—Me importa una mierda.—¿Qué

Capítulo 28

EVERLY Estaba cabreada y confundida, y a falta de mi Daddy y de que ahora esté por seis meses de luna de miel con Analy, decidí hacer una fiesta de las que me gustan, mucho alcohol, muchos chicos apuestos y por supuesto, mucho baile, el que me enterara que el estúpido mayordomo que recién contrató Kavan, estuviera de chismoso a mis espaldas, solo hizo que enfureciera y quisiera darle una lección a ambos. El primero yace amarrado en el sótano, y el segundo, ahora está frente a mí, mojado y con los ojos centelleantes. Todos se ríen y yo también, León, su amigo, mira la escena con diversión y creo que me cae un poco mejor que el estirado de mi hermanastro. —Wooow —exclama Emma a mis espaldas—. ¡Aquí no pasa nada, la fiesta sigue! La música sigue y mis amigos se dispersan siguiendo en lo suyo, la sonrisa en mis labios no tambalea, no se esfuma, mucho menos cuando Kavan me toma del brazo con fuerza y me arrastra hacia la oficina

Capítulo 29

EMMAPoco a poco todos nuestros compañeros se marchan, me gustaría decir que ha sido la mejor noche de mi vida, pero no, nunca estuve de acuerdo con Everly sobre esto, molestar a su hermanastro solo porque se niega a aceptar la atracción que siente hacia él. Pero al final accedí porque la quiero, es como una hermana para mí, y ahora estaba aquí, recogiendo como siempre los trapos sucios mientras ella folla.—Eso ha sido increíble —me dice Alan, uno de nuestros compañeros.Es apuesto, pero no mi tipo, es que a mí suelen gustarme mayores y este es un poco aniñado.—Claro, la hizo Everly —río por amabilidad.—Vamos

Capítulo 30

EVERLYNo puedo creer que un segundo esté queriendo patearle las pelotas a Kavan y ahora me encuentre completamente desnuda sobre su cama, bajo su cuerpo, no ha parado de besarme y frotar su erección en mi vientre para que sienta su dureza, me ha dejado marcas en el cuello que por la mañana tendré que cubrir, sus manos recorren mis curvas y la imagen de Jolie viene a mi mente siento el peor momento, el que me amenazara solo hace que esto se sienta como lo que es, algo incorrecto y puerco.—Kavan —intento separarlo de mí, pero me es imposible.Se tiende de mis pechos como si su hambre sexual fuera demasiada, duele cuando me mordisquea los pezones y gimo al sentir que me abre de piernas.

Capítulo 31

EVERLY —No creo que sea buena idea que le ocultemos estas cosas a Emma —Dice Bruno metiéndose una papa a la boca. —Así como tampoco es buena idea el que yo esté aquí —aclaro señalándonos. —¿Hasta cuando vas a seguir en ese plan? Admito que la cagué, pero te sigo amando, y en esto estamos juntos —se inclina hacia mí—. Escucha, puedo ser una mierda de persona, te herí, pero no soy tan cabrón como para dejarte sola en esto. Me quedo callada, bajo mis defensas solo porque sé que tiene razón. La nota que había visto era un mensaje diciendo que me estaban vigilando. —Tengo miedo —confieso. —Lo sé, pero tienes que hablar. —¿Con quién? La policía no hizo nada aquella vez, decirle a mis padre no es opción tampoco, está de luna de miel y ni de broma pienso hablar con Kavan —replico. —No pude conseguir mucha información, en la cazadora que me diste no hay huellas dactilares, es como si nadie la hubiese t

Capítulo 32

EVERLYMis puños permanecen cerrados mientras me giro al ver a Jolie desnuda, de pronto el clic de la puerta se escucha y con mi orgullo y dignidad pisoteada, salgo de la habitación, bajo las escaleras sabiendo que Kavan no me joderá porque está demasiado entretenido. La rabia me consume y creo que jamás me había sentido tan humillada en mi vida, ni siquiera con lo sucedido con Bruno. Llego a la estancia principal observando todo, y una amplia sonrisa se aloja en mi rostro al ver que el idiota ha dejado las llaves de su auto sobre la encimera en la cocina.Las tomo, abro la puerta que para mi suerte al parecer el sistema de seguridad ha sido anulado, salgo y me dirijo a su maldito auto, subo, enciendo motores y arranco. Bien, si eso quería, si deseaba jugar conmigo, le enseñaré lo que es jugar con una Hilton y perd

Capítulo 33

EVERLY Esperar a mi padre afuera de su oficina hasta que termine de hablar con Kavan, me hace pensar en aquellos tiempos de mi infancia donde hacía lo mismo cada que me portaba mal o las maestras les daban la queja sobre algo. Mi padre y Kavan se habían encerrado hace media hora. Por lo que dijo su madre, al parecer habían visto la noticia sobre el chiste de mi hermanastro y vinieron lo más rápido que pudieron. «Esto me pasa por meterme con un vejete» Muevo el pie con impaciencia hasta que la puerta de su despacho se abre. Mi padre me mira y me indica que entre, en cuanto lo hago, veo a Kavan sentado tomando tranquilamente un trago en uno de los sofá, me mira y luego aparta su atención de mi en cuanto mi Daddy se sienta en su escritorio. —Kavan me ha contado todo lo ocurrido con Bruno —comienza—. ¿Por qué no me lo dijiste antes, cariño? —Lo intenté, es solo que… —No quiero ni imaginarme lo que tuvo q

Capítulo 34

EVERLY Miro mi reflejo en el espejo y no puedo pedir nada más, me he puesto un vestido de cóctel, sensual pero discreto, con ligeros holanes en la falda y me he dejado suelto el cabello dejando que caiga como cascadas sobre mis hombros. Dejo el labial en mis labios y sonrío. —Joder, no creo que Kavan se ponga feliz de eso —dice Emma detrás de mí. Quien trae puesto un sencillo vestido con un escote demasiado provocador. —¿En serio me dirás eso? Sé que te has puesto eso por algo. Giro a verla con las manos en jarras. Su semblante cambia radicalmente, realizando una dulce mueca. —No sé de qué hablas —blanquea los ojos. —Claro que lo sabes. —No. —Como digas. No sé que trae con León, pero he notado que cada que lo ve, se sonroja y está actuando muy diferente, nada que ver con la loca de siempre. Hago a un lado todo y para cuando bajamos a la estancia principal, ella habla con Analy