Todo el mundo lleva algo en el corazón que lucharía por proteger. Para James, ese algo eran su familia y sus amigos.

El corazón de James hervía de ira después de enterarse de que Lucius, Sedris, Xylus y Toma habían capturado a su esposa e hijos.

Henrik lo consoló diciendo: "No te preocupes, James. Vayamos al Monte Stoyan y destruyamos a esos bastardos".

Byron miró a Henrik. No tenía ni idea de los antecedentes de Henrik ni de la técnica que había utilizado. Sin embargo, el miedo que le tenía la Gran Partriarca de la Secta Diablo era suficiente para probar su fuerza.

A pesar de saber que Henrik era excepcionalmente fuerte, Byron le hizo un recordatorio. "Es mejor tener más cuidado. Anteriormente, varias potencias habían aparecido en el Monte Stoyan, incluyendo a Yardos, el Maestro Ancestral de Sangre, Zula, y algunos cultivadores del grado Caelum Sin Límites. Todos los demás fueron capturados excepto Yardos, que huyó con heridas graves".

James respiró hondo, reprimiendo su ira.

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