Nunca tuvo ocasión de darle las gracias antes de que falleciera.

Joan Dunn también estaba en silencio.

Cuando era delincuente y mala en la escuela, James fue quien la motivó a cambiar de vida.

Falleció antes de que pudiera conocerlo.

Los demás también se mostraron renuentes.

Su delegado de clase había sido siempre el Dragón Negro. El hombre que fue más allá por su país y luchó por su seguridad, pero murió dentro de sus fronteras.

Tras el homenaje, todos se turnaron para encender el incienso.

El acto duró hasta el mediodía.

De regreso, James abrazó a Thea y le dijo con dulzura: “Cariño, las carreteras de montaña son más difíciles de transitar, ten cuidado. ¿Quieres que te lleve en brazos?”.

“N-no”. Thea se sonrojó. Había tanta gente a su alrededor, ¿Cómo iba a decir que sí?

Quincy sintió una punzada de celos al verlos.

Sentía celos de Thea por tener un esposo leal que siempre estaba a su lado.

El grupo regresó a la villa.

Thea quería almorzar en la villa antes de volver, pe