'¿Podría ser que su fuerza hubiera llegado a un punto en el que incluso yo ya no pudiera sentirla?'.

Tamuuz estaba perplejo.

Después de un tiempo, miró a James y cerró los puños, diciendo: "Amigo mío, la operación del Santuario no tiene nada que ver contigo. Por favor, vete ya. Te estaremos eternamente agradecidos".

James miró a Tamuuz. En ese momento, llegó la voz del emperador Jabari: "Ten cuidado, James. Es un Gran Emperador del Séptimo Cielo. Aunque absorbas todo mi poder y actives por completo tu fuerza física, él podrá destruir tus defensas físicas fácilmente.".

Al escuchar esto, la expresión de James se volvió sombría.

Sin embargo, ya que el Santuario había llegado, no le quedaba de otra que enfrentarse a ellos de frente.

Al mirar a Tamuuz, una expresión compuesta apareció en su rostro mientras decía despreocupadamente: "Lo siento, pero no se puede".

El rostro de Tamuuz se ensombreció y dijo con frialdad: "¡Tú te lo buscaste!".

En circunstancias normales, ya habría ataca