James se quedó atónito ante aquel repentino cambio de expresión.

Yevpraksiya se armó de valor y saltó al abrazo de James. Mientras lo sujetaba con fuerza, su respiración se aceleró.

"Señor Caden, aún quedan doscientos años. ¿No deberíamos hacer algo juntos para pasar el tiempo?".

James estaba completamente aturdido. ¿Qué estaba pasando?

Pasaron unos segundos, y con firmeza apartó a Yevpraksiya. Se sentó en una silla y sacó unos cigarrillos que había tomado de la Tierra. Encendió uno y la miró con cara seria.

En ese momento, el vestido de Yevpraksiya ya estaba tirado en el suelo. Se quedó a un lado, tímida, evitando mirar a James.

Él dijo en tono serio: "No lo hagas".

"Señor Caden, ¿cree que no soy digna de usted?". Yevpraksiya lo miró a los ojos.

James se rascó la cabeza y respondió torpemente: "No es eso".

"¿Entonces es porque no soy lo suficientemente bonita? ¿No te gusta mi figura?".

"No, eres impresionante y tu cuerpo es atractivo. Es solo que...". James vaciló y continuó