Aun así, Callan seguía siendo uno de los artistas marciales más poderosos del mundo.

“¿Dónde está Thomas?”, preguntó Callan.

James sacudió la cabeza y dijo: “No puedo llegar a él. Es una figura escurridiza. No sabes dónde puede estar en este momento. Cada vez que se va, no puedo encontrarlo por mucho que lo intento”.

“¡Jajaja!”.

En ese momento, una carcajada sonó desde fuera.

Seguidamente, la puerta se abrió.

Entró un hombre vestido con una túnica blanca.

Al ver al hombre, James puso los ojos en blanco y preguntó: “Abuelo, ¿siempre estás cerca de mí? ¿Cómo te las arreglas para aparecer cada vez que menciono tu nombre?”.

Thomas se acercó a James y tomó asiento, entonces, dijo con una sonrisa: “Si no fuera porque te protejo de las sombras, hace tiempo que estarías muerto”.

“Abuelo, te habrás enterado de que pienso ir a Malgudi”.

Al escuchar esto, la expresión de Thomas se volvió sombría. Al rato, asintió ligeramente con la cabeza y dijo: “Sí, lo escuché”.

“¿Cuál es