"Lo más importante ahora mismo es salvar nuestras vidas y evitar el peligro. Luego, podremos prepararnos para el futuro", dijo Darryl con mirada complicada.

Él no quería dejar ir al Príncipe Auten tan fácilmente, sobre todo porque sabía lo astuto y taimado que era el Príncipe Auten. Las consecuencias serían insoportables si él obtenía el control de la Secta Llama Verdadera. Sin embargo, no podía hacer nada. Carecía del poder divino para luchar contra el Príncipe Auten.

Raquel se mordió el labio y luchó en su corazón después de escuchar el consejo. "Si es así, no puedo irme". Ellos pensaban que ella había traicionado a la Secta Llama Verdadera. Si se iba con Darryl, la suposición se volvería real.

"¿Pero qué vas hacer si te quedas? ¿Cómo te vengarás si ni siquiera puedes seguir con vida?". Darryl preguntó con impotencia.

Raquel guardó silencio como respuesta y miró a su alrededor. Aún había cientos de discípulos rodeándolos. Por el momento, temían de su poder. Ella y Darryl no serí