El golpe chocó con el escudo protector justo cuando estaba a punto de completar su forma y lo destrozó de inmediato. El cuerpo de Neil se sacudió hacia atrás mientras sangre fresca brotaba de su boca. Luego, cayó del cielo.

Después de derribar a Neil, Yooda envió otro golpe en dirección a Chester.

“Ustedes dos son bastante fuertes pero igual no son rivales para mí”. Cuando asestó el golpe, el tono de Yooda se volvió arrogante y su expresión era de burla.

¡Hijo de p*rra!

Cuando vio que su hijo estaba herido, Chester entró en pánico y no pudo esquivar el golpe de Yooda a tiempo. Todo lo que podía hacer era enfrentarlo con todas sus fuerzas.

Al segundo siguiente, sus palmas chocaron violentamente. Chester sintió que una fuerza abrumadora lo golpeaba mientras lo enviaban volando cien metros hacia atrás como una cometa suelta. Luego, aterrizó pesadamente en el suelo.

Al caer, la sangre brotó de la boca de Chester. Su alma estaba torcida y su energía interna estaba completamente desord