En respuesta a lo que dijo Keane, los demás asintieron con la cabeza.

“Así es, hemos estado buscando un esposo para Jewel. Es por su propio bien”.

“Eres solo un guardaespaldas. ¿Qué derecho tienes para interferir?”.

Todo el mundo intervino. Keane miró a Darryl de forma burlesca y dijo: “Si supieras qué sería lo mejor, te habrías ido de inmediato. Estamos discutiendo sobre asuntos familiares. Un forastero como tú no tiene derecho a estar aquí”.

‘Mald*ta sea. Qué arrogante’.

Darryl estaba tan furioso que se echó a reír. Luego, miró a Keane de cerca y dijo: “¡Qué interesante! Como familia, obligaste a Jewel a renunciar a su felicidad por tu propio beneficio, pero hablas como si tuvieras razón. Qué desvergonzado”.

“¿Qué dijiste?”. El comportamiento de Keane cambió y reprendió.

Darryl se burló: “Estoy seguro de que todos ustedes entienden lo que estoy diciendo”.

En ese momento, Jewel también los reprochó: “Tío, si todavía insistes en ser así, entonces no creo que sea necesario que y