El Segundo Dragón y los demás inmediatamente miraron a Darryl. Él sonrió amargamente mientras les explicaba la situación. Después de todo, ellos eran sus hombres; él no temía que se rieran de él.

Sin embargo, el Dragón Mayor se rio después de la explicación de Darryl. “¡Ya veo! Así que, fuiste a rescatar a la Princesa, pero los guardias del palacio te dominaron. Maestro, ¡el Emperador debió haber pensado que moriste cuando caíste al foso! Además, Eric Scope y sus discípulos actualmente te están buscando, ¡lo cual estoy seguro de que alarmará a la familia real pronto! Si descubren que no estás muerto, bueno, ¡ni siquiera puedo soportar pensar en las consecuencias! Sin embargo, ¡tengo una solución para su problema más urgente!”.

El Dragón Mayor sacó una máscara; era tan fino como el papel y tenía unas facciones exquisitas.

“¿Una máscara?”. Darryl frunció el ceño.

El Dragón Mayor sonrió misteriosamente y dijo: “¡Maestro, esta máscara es un tesoro precioso! Siempre y cuando te lo ponga