En ese momento, Darryl todavía no sabía que Stella era una mujer hermosa. Ella solo se volvió fea debido al veneno.

Mientras pensaba en eso, Darryl preguntó: “¿Esta dama ha sido envenenada?”.

“¡Sí!”. Eric asintió con la cabeza; sus ojos estaban llenos de dolor e impotencia.

Él era el Maestro de la Secta Isla del Fuego Hielo y alguien en el nivel de Ascensión Celestial, pero no podía salvar a su amada hija. Era la cosa más irónica.

Darryl sonrió y continuó diciendo: “Si no me equivoco, ella fue envenenada por la Flor del Cadáver, ¿verdad?”. Luego, Darryl echó un vistazo más de cerca a la situación de Stella.

La Flor del Cadáver era una planta extremadamente venenosa. Crecía en lugares donde se reunían los espíritus malignos. Absorbía específicamente los nutrientes de los cadáveres, de ahí su nombre.

El Manual del Elixir Infinito mencionaba que el veneno reuniría el campo de energía de su víctima para acelerar su muerte. Una persona común habría muerto en el lugar, pero los cultiva