“¿Su Majestad?”.

“Su Majestad...”.

Cuando los guardias vieron al Emperador Hou Yi, ellos fueron extremadamente respetuosos. Todos se arrodillaron de inmediato en el suelo.

El disfraz de Darryl era tan exquisito que los guardias realmente pensaron que él era el Emperador Hou Yi.

Darryl estaba inexplicablemente emocionado. Él usó su técnica de imitación e imitó el tono del Emperador Hou Yi. Él dijo rotundamente: “Pueden levantarse”.

La técnica de imitación de Darryl era tan perfecta que los guardias que estaban frente a él no dudaron en absoluto de él. Ellos se pusieron de pie con cautela.

“Mmm...”. Darryl se quedó en silencio; él luego agitó sus manos. “No los necesito aquí hoy, así que todos pueden retirarse. También, ¡díganles que retiren a los guardias de todo el palacio!”.

‘¿Qué? ¿Retirar a todos los guardias?’. Los guardias se sorprendieron al escuchar eso.

Sin embargo, nadie se atrevió a cuestionar sus órdenes cuando vieron el rostro severo de Darryl.

“¡Sí, Su Majestad!”.