"Oye, pequeño eunuco, ¿no vas a escribir un poema para elogiarme?". La princesa Evergreen levantó su gentil mano y con fuerza usó el cinturón de cuero para golpear a Darryl mientras hablaba.

¡Zaz!

Se escuchó el sonido cristalino del cinturón, y una marca roja de sangre apareció instantáneamente en el hombro de Darryl.

No pudo evitar tomar una respiración fría y profunda. Se sintió enfurecido.

“Yo solo estaba de paso. ¿Cuándo la ofendí?”.

En ese momento, la ira de Darryl estaba a punto de estallar, pero trató de contenerse.

"No he encontrado a Quincy y todavía no he recuperado la Esencia de Dragón. Si tomo represalias contra la princesa, definitivamente atraeré a los guardias. Al mismo tiempo, mi plan de registrar el palacio también será en vano", pensó.

En ese momento, notó la mirada de Darryl. La expresión de la princesa Evergreen se volvió fría antes de regañar a Darryl: "¡Cómo te atreves a mirarme!".

Volvió a levantar el cinturón de cuero. Al darse cuenta de esta acción, Dar