Jasmine

Querido diario,

Después de todo lo que viví… estoy bien.

Curioso, ¿no? Si no me hubiera sentido mal aquel día, tal vez nunca habría descubierto todas las atrocidades que la rubia cometió. Sé que no debemos desearle el mal a nadie… pero, ¡vaya! Se lo ganó.

Todavía recuerdo la sensación — el placer de ver su rostro después de la paliza que yo misma le di, sin que Anthony supiera. Sí, fui hasta la cárcel sola, y no me arrepiento en lo absoluto.

Ahora está muerta. De verdad.

Y aunque hizo tanto daño, confieso que siento un poco de tristeza. Era joven, hermosa… tenía toda una vida por delante. Fingió estar muerta durante años y, al final, el destino le devolvió todo. Qué ironía…

En fin, ya pasaron algunos meses desde todo eso, y hoy puedo decir con toda certeza: estoy bien.

De hecho, tal vez… embarazada.

Todavía no le conté a nadie. Ni siquiera a Anthony, que anda perdiendo la cabeza de celos desde que descubrió dónde estoy trabajando. ¿Puedes creer que casi golpea a su hermano, s