Jazmín

Me desperté el sábado bastante tarde, calculo que serían sobre las dos de la tarde. Miro a mi alrededor y me doy cuenta de que no estoy en mi propia habitación.

Vaya, me puso cómoda en la cama y ni siquiera me di cuenta.

Ahora entiendo la razón por la que me encuentro en una habitación diferente, mantengo mi lado oculto bajo llave, por eso no me envió allí.

No puedo mantener mi puerta abierta con tantos secretos guardados, especialmente en mis diarios. Imagínese si algún empleado curioso entrara y leyera todo lo que escribí sobre mi encantador jefe.

Cuando se trata de mi excelente jefe, estoy seguro de que estará furioso por haberme elegido. Pero no me pueden culpar, ¡le pedí a Pedro que me recogiera, no a él!

Si él tiene un desacuerdo conmigo, yo también estaré en desacuerdo con él, no me importa si es mi jefe.

Hombre extraño, no entiendo por qué vino a buscarme.

No sé el motivo, porque Pedro había accedido a recogerme.

¡Recuerdo claramente que el chico era sumamente atractivo