EmilyCuando creemos que tenemos todo controlado, parece que el destino se burlara y te dijera que no es así, que es el quien manda y que debemos hacer las cosas según su favor.Siento que de repente el sudor comienza a correr por mi frente y que la tensión se me ha bajado, que mi corazón es una maquina que late mas rápido de lo que un ser humano puede soportar. Veo al hombre que amo y odio al mismo tiempo que camina hacia nosotros y la ira que se le dibuja en el rostro es como si se quisiera comer a Jacob vivo.Como se que es capaz, hago a un lado a mi primo y soy yo la que se pone frente a el, lo miro pidiendo calma y vuelvo a enfrentar al hombre que viene como un toro hacia nosotros.—Te dije que no tocaras a mi mujer— le apunta en la cabeza sin importarle que yo esté en medio—Yo no soy tu mujer Viktor, y baja esa arma— intento quitársela, pero soy tomada de la cintura y miro con horror a Leandro que me quitó de en medio —¿Qué haces? Suéltame—Es mejor que no te Metas Em.—¡No me
ViktorEl haber conseguido a Emily, ya es un respiro. Mi padre me ha estado tocando las bolas con eso de las amenazas. Faltan algunas semanas para que se vayan los Ivanovish, pero le demostraré a mi padre que no haré lo que dice, y menos teniendo a mi familia.Si me quiere mandar a matar, adelante. Solo que primero le daré guerra.Llegamos a la nueva casa y Emily al ver que me estaciono, frunce el ceño.—¿Y esto?— pregunta cuando me bajo y doy la vuelta para abrir su puerta—Esta será nuestra casa, aquí el bebe crecerá mas seguro.Decir esa palabra en voz alta, hace que mi orgullo se hinche, decir que mi esperma embarazó a mi mujer, y ahora me dará un hijo, hace que quiera gritar como un animal y que todos se enteren, incluso el mismo Henry Berks.—Pues no me quiero bajar— se porta como una niña mimada, parece que aun no me conoce—Sabes que te puedo obligar, tu decides— rueda los ojos y sonrío cuando veo que se baja del auto—Quita esa estúpida sonrisa o te la quito.—¿como?— su cuer
EmilyDecir que no me gustó la casa que compró Viktor, sería mentir. Es enorme y se parece mucho con la que alguna vez soñé tener si me llegaba a casar. Todo es moderno, y precioso, y aunque aun resuenan las palabras que me dijo en mi mente, aun siento ese sentimiento de culpa por estar con el.Es como si de alguna manera estuviera engañando a mi madre, por amar y estar con el hombre que pertenece a la familia que la asesinó, por otro lado el tiene razón, nuestras familias han estado en guerra siempre, ¿Por qué debemos pagar por los pecados de ellos?Sacudo la cabeza quitando mis pensamientos y por un momento me permito tener paz. Camino por la casa para conocerla mejor y me enamoro a medida que avanzo. Ya me imagino a mi pequeño o pequeña jugando por acá.Es de dos plantas y las escaleras tienen forma de caracol, está protegida con paredes de los lados con sus barandas y tiene un diseño precioso.Al llegar al segundo piso, miro lo grande que es, hay una segunda sala de estar con mueb
EmilyLa tarde llegó y aunque me cueste creerlo, la preocupación también, me pregunto ¿Qué pasó con Jake? ¿Mi tía preguntará por mi con el nombre de su hija? Me da tristeza que estén solos o que mi tía empeore con mi ausencia, pero decirle a Jacob que se venga, es una locura sabiendo que odia a Viktor o al menos eso fue lo que demostró.—¿en que piensas?— la voz de Leandro me saca de mis pensamientos—En la familia que dejé en la cabaña, estoy preocupada por ellos— admito delante de él—tráelos, aquí hay habitaciones suficientes para que se queden, sino Viktor es capaz de construir una para verte feliz— rueda los ojos con la sonrisa lobuna que usa para conquistar—Lo se, pero no se si mi primo se quiera venir, conoce la historia de nuestras familias y odia a Viktor.—O créeme que lo sé— monta los pies en la mesa pequeña del centro. Estamos en la sala de estar y Vik me dejó con el mientras se iba a hacer algunos “trabajos” —cuando ustedes se fueron que lo solté, me dio un derechazo en
ViktorCamino por alrededor de la casa nueva viendo como van las funciones de mis hombres en el lugar, estos son los nuevos que he contratado y les he dejado en claro que cualquier falla, lo pagaran con su vida.Examino el terreno de la propiedad que se construirá junto a esta para que vengan los familiares de mi reina.—Señor, creo que en un mes estaría listo todo, incluso contrataremos mas personal para la construcción del túnel subterráneo—Esta bien, solo Asegúrate de mantenerlo en secreto, y luego desaparecer los testigos.Lamentablemente con este tipo de proyectos, no puede quedar testigos que indiquen a los enemigos como esta quedando todo o cuales son los puntos débiles. Algo aprendí de mi padre mientras mi hermano estaba a cargo, y era que no se debe confiar en nadie, porque hasta del que menos te espera, puede traicionarte.Enemigo hay en todos lados, por eso todo aquel que es contratado para este proyecto, deben quedarse así tengan que montar carpas, nadie sale de la propie
ViktorCamino entre los paquetes que ya están listos para enviar a Miami, con uno de mis socios nuevos, de esos que obtuve cuando acabé con los Scott. He estado afianzando los lazos con esos socios nuevos, demostrándole que soy el mejor proveedor que tendrán y con mejor precio.—Creo que hay un socio nuevo que quiere hacer negocios— Leandro supervisa a los que cargan todo a la avioneta y yo sigo mirando como terminan de empaquetar todo —es otro que era aliado de los Scott.—Ya sabe donde encontrarme— lo dejo allí y me voy con uno de los hombres que está empaquetando. Tomo uno de los empaques y se pone nervioso, sé que algo anda mal —Pésame este— le digo al que tiene al lado y ese frunce el ceño, pero obedece. Quito la vista un momento para ver la balanza, y cuando lo pesa, su cara se transforma en sorpresa y después de miedo, se que no tiene nada que ver, pero teme a que lo mate a el tambien. —pésame este otro— le lanzo otro paquete que ataja en el aire y lo vuelve a pesar, me doy cue
EmilyNunca había salido vestida de hombre, solo aquella vez que me escapé de casa de Viktor, pero por suerte aquella mujer me prestó un vestido, ahora vuelvo a repetir lo mismo. Ando con unos monos deportivos color azul, que imagino usa Viktor para correr en lo que va al Gimnasio, una camiseta de algodón blanco manga largas y una gorra que me dejará un poco desapercibida de quien soy. Nunca había estado lista tan rápido en mi vida, por eso corro escaleras abajo. Tomo un cuchillo de la cocina y lo guardo en un costado por si me encuentro a la zorra esa que se que aprovechará cualquier oportunidad de verme indefensa.Voy hasta la puerta y la abro, topándome con uno de los gorilas que pone Vik para cuidarme—¿A dónde va?— Me habla uno de ellos con el ceño fruncido obstaculizado la puerta. Al menos este me habla, porque los de mi padre ni siquiera me veían—Tengo que buscar a Viktor, así que dame espacio para salir.—Lo siento señorita, pero tengo ordenes de no dejarla salirSaco el cuch
Extra de Leandro***—No— respiro agitado por el miedo que me toma —Por favor Déjala. Puedes llevarme a miLa risa malvada que se le dibuja en el rostro, me provoca escalofríos.—Yo no te quiero a ti, pequeño. Tu hermana crecerá, y ella valdrá mucho si la mantengo virgen hasta que cumpla 14. La edad perfecta para ser vendida a buen precio.Busco con mi vista algo con que defenderla, pero no hallo nada—Te suplico que la dejes— las lágrimas que me corren por las mejillas las siento amarga. solo deseo ser mas grande y tener la fuerza suficiente para darle su merecido a este hombre que se quiere llevar a mi hermanita.—Llévensela— ordena a sus hombres y mi pequeña hermana solo llora, es mucho menor que yo, y aunque no entiende lo que está pasando, sabe que algo anda mal y llora desesperada.Corro hacia donde está el hombre que me quita a mi hermana y le muerdo el brazo haciendo que su arma apunte a cualquier dirección y se le vaya un disparo, el grito que suena por el lugar, me hace volt