Jack.-— ¿Qué haces tú aquí? –Le preguntó cuándo Olivia se asoma queda igual o más sorprendida que yo.— Jack. –Susurró, podía ver como su pecho subía y bajaba agitado.— Uhm… Yo los dejo para que conversen, Olivia te hablo luego –Joel sale por la puerta alejándose, mientras yo sigo parado en el mismo lugar sin ni siquiera pestañear, viéndola sin poder creerlo, está igual de hermosa con ese rostro gentil y dulce que la caracterizaba.— Creo que deberías pasar, sabía que Emma te daría mi ubicación –Se giró instándome a seguirla, moví mis pies por inercia.— ¿Por qué volviste? –Fue lo primero que se me ocurrió preguntar.— Yo pasé por lo mismo que está pasando Emma, tuve un hijo con Leucemia solo que él no pudo superarlo y si no utilizo mi dinero para ayudar a mi propia familia ¿Entonces qué?— Te lo agradezco, cuando conozcas a Sophie no te vas arrepentir, entonces ¿Te casaste?— Sí, Ricard fue un gran hombre él supo sanar mis heridas y me dio una gran vida, logró enamorarme fuimos muy
Emma.-Estaba en la celda esperando por Emma, tenía que contarle lo de Irina antes que la trasladaran, su abogado convenció al juez de anular el juicio debido a la confesión de Ella, le dieron cincuenta años, veinticinco por cada homicidio, le cedió a Joel todos los derechos de Dominic, antes del secuestro Noah le solicitó su ayuda para quedarse con el niño cuando quería mi aliado podría dar mucho miedo y Ella firmó los papeles sin dudar.— ¿Vienes a burlarte de mí una vez más? –Preguntó entrando por la puerta con el uniforme naranja y las manos esposadas adelante.— Vine a darte una noticia, Irina está muerta –Se detuvo en seco antes de sentarse.— ¿Cómo? –Preguntó.— La encontraron en la habitación de una isla de caribe, el abogado que había contratado para ti resultó ser su amante que la robó y la asesinó, lo están buscando. –Se quedó en silencio mirándome, me sorprendí al ver que no botó ni una sola lagrima, no había un atisbo de sufrimiento en su mirada, por primera vez sentí much
Noah.-Pensé que lo peor de todo esto era estar en esta cama tan vulnerable y débil, pero no Emma acaba de lanzar la última bala para terminar de aniquilarme ahora simplemente solo quiero echarme a morir y quedarme en esta cama. Hace unos días seguía decidido a trabajar por recuperarla, por volver a enamorarla, pero ver sus ojos llenos de puro desdén y sus palabras, fueron peor que los golpes que recibí de los matones de Irina, la puerta se abre dejando entrar al médico que me atiende junto a dos enfermeras y David que al verme a los ojos frunce el ceño.— Muy bien Noah, recibimos los resultados de los rayos x y podemos quitarte la placa del rostro, la fractura ya ha mejorado –Lo miraba pero ya no me importaba, tenía la mirada perdida, echaron la cama hacia atrás poniéndola en posición horizontal, la luz de neón nublaba mi vista, no sé cuánto tiempo demoró el retiro de la férula metálica. –Intenta abrir y cerrar la boca lentamente Noah, ten –Me tendió goma de marcar, lo mire confundid
Noah.-Había pasado una semana desde que me retiraron las férulas de inmediato comencé con la rehabilitación física mis músculos estaban atrofiados y dolía solo dar un pequeño paso, el sudor caía por mi frente, la camiseta estaba empapada mientras me sujetaba con fuerza de las barras para caminar, me alegra que la m*****a de Irina haya tenido su merecido aunque me pareció un castigo muy rápido.— Muy bien señor James cada día avanza más –La encargada de mi terapia una mujer de piel trigueña, cabello rizado castaño y ojos de color marrón me sonreía con orgullo, pero yo estaba lejos de sentirme así.— ¿Cuándo acabaran los dolores? –Mi respiración era errática la banda no tiene ni dos metros y yo sentía que había corrido un maratón de quince kilómetros.— Sus músculos estuvieron mucho tiempo sin movimiento cuando menos lo espere verá que no recordara el dolor, así como irá poco a poco recuperando la resistencia en su cuerpo, tuvo un neumotórax su pulmón aun e recupera de eso, puede optar
Noah.-No he tenido ni un solo avance con Emma, cada vez que puede me esquiva poniendo entre nosotros a Joel, Sophie me visita en compañía de mi padrino, no me permite acercarme a su casa, las veces que he venido a la clínica ella desaparece por completo o se esconde, paso de ser la más odiada a la más apoyada y querida de este lugar, obviamente no conseguiré ningún aliado para acercarme a ella, David ha podido dejar mis encargos gracias a que conoce la clínica como la palma de su mano y con la excusa de visitar a Celia la amiga de Emma.— ¿Estás seguro que es una buena idea? –David cuestionaba mi decisión de invitar a Susan al coctel de inauguración de St. James. –Estás caminando sobre arena movediza después no digas que te no te lo advertí.— Un poco de celos no vendría mal, Emma debe darse cuenta que también puede perderme –David suspiró con fuerza negando con frustración.— Yo no deseo ver esto adiós –Se alejó dejándome con Susan que lo miró confundida.— Creo que no le caigo bien
Emma.-Mi cuerpo es un traicionero al responder al contacto con el hombre que nos hizo sufrir tanto, mi corazón late tan fuerte como la primera vez teniendo sus labios tan cerca a punto de besarme, sus dedos se aferran a mi cintura pegándome a su cuerpo que reacciona a mi cercanía siento como mi temperatura va en aumento, intento ser racional, pero mi mente ha quedado en blanco con el aroma de esa fragancia que mi cerebro se grabó en lo más profundo.— Emma… –Susurró mi nombre con un jadeo, de manera posesiva estampó sus labios a los míos sentí el calor de su aliento acariciando mi piel y el latido de mi corazón parecía acompasarse con el suyo, su lengua exploraba mi interior con necesidad y posesión reclamando lo que siempre ha sido suyo.Pero el momento se ensombreció cuando a mi mente vinieron los recuerdos de sus tratos y el recuerdo de ese momento en Grecia en el que me di cuenta que lo nuestro ya estaba roto, abrí los ojos no me había dado cuenta, pero Noah se las había arreglad
Emma.-Había olvidado lo hermoso que es Suiza no dejo de mirar embelesada y con una gran sonrisa las montañas cubiertas de nieve, la tranquilidad definitivamente lo necesitaba. Vine Suiza a concretar el capital de un inversor interesado en el laboratorio para el proyecto de Olivia, exigió reunirse con la dueña del St. James específicamente y no pude negarme, hace tres días que estoy en Suiza aunque sigo ansiosa por dejar a Sophie en Seattle.El inversor se disculpó por hacerme viajar, me sorprendió que estuviera al tanto de la situación de mi hija, confesó que buscabas proyectos para invertir y St. James está en boca de todos, el equipo de relaciones públicas de la clínica ha hecho muy bien su trabajo.Lo único que me convenció venir es saber que el estado de salud de Sophie mejora con cada día que pasa, por fin siento que el alma me vuelve al cuerpo mientras ella este bien yo lo estaré. Y este tiempo a solas aunque sea corto me servirá para pensar en lo últimos días me he sentido con
Emma.-Veía el amanecer anoche no pegué un ojo, la cabeza me daba vueltas amo a Noah de eso no tengo dudas, de lo que tengo dudas es que mis heridas nunca puedan sanar, que él no sepa ayudarlas a cicatrizarlas, también está herido lo que Brad sigue siendo un golpe del que no se recupera. La idea de Kim sobre ir juntos a terapia cruzó por mi mente.(…)Después del baño medita la idea de la terapia de pareja, extraño llamarlo así no es que nos peleemos por quien va a lavar los platos, pero podría ser una solución.Baje las escaleras sintiendo el aroma del desayuno y el chocolate caliente, me detuve al ver a Noah en la cocina nuevamente semi desnudo un con pañuelo de cocina en un hombro no sabía que cocinaba, en ese momento me di cuenta de lo poco que nos conocemos.— ¿Desde cuándo cocinas? –Pregunté sentándome en uno de los taburetes, tragando grueso por la hermosa imagen que tenía parada frente a mí.— Solo sé cocinar platillos suizos –Se giró con la sartén en la mano sirviendo un deli