Mi matrimonio con Dixon consistía en puro sufrimiento.

Siempre había sido una mujer que no se quedaba callada cuando me intimidaban, pero con Dixon actuaba de forma muy diferente. Me mostraba débil ante él, y nunca me atreví a confesarle mi amor. No hubo una felicidad inolvidable con él en mi memoria. En vez de eso, solo hubo decepciones, ¡junto con la pena y desesperación interminable!

Aun así, nunca me arrepentí de mi matrimonio. Al fin y al cabo, formaba parte de mi pasado.

Respetaba mi propio pasado.

Respetando mi pasado, podría alcanzar mi felicidad en el futuro.

¿Y mi matrimonio con Zachary?

Él me enseñó cómo un matrimonio podía ser mejor. Dos personas podían poner su confianza en el otro y amarse incondicionalmente. Zachary me enseñó muchos principios de la vida a lo largo de los dos últimos años, ¡especialmente sobre nuestro amor!

En retrospectiva, mi vida pasada estaba llena de tristeza y de pena. En el momento en que conocí a Zachary, ¡todo eso se desvaneció instantán