Segundo capítulo del maratón, recuerden dejar sus comentarios.
| Neylan | Observo como están terminando con el último de los nuevos integrantes, es un hombre joven, tal vez unos veinte años, moreno, extraños ojos azules y cabello largo negro atado en forma de una coleta, obviamente no es alemán, pienso que ninguno de ellos lo es, ni siquiera creo que sean europeos ni mucho menos americanos, ahora que lo pienso tal vez tengan una barrera con el idioma, pero son estudiantes, supongo que esto sera parecido a los intercambios que veía en mi escuela, donde traían a estudiantes de otros países y obligatoriamente tendrían que aprender inglés en pocos meses. Salgo de mis pensamientos cuando Kurt se acerca a mí y aprieta mi cintura, extrañada lo miro sin entender hasta que él con sus ojos me señala a los nuevos miembros del clan, de inmediato capto la seña, estaba tan sumergida en mis pensamientos que se me olvido por completo. — Sean bienvenidos, estamos emocionados por tener nuevos miembros así sean temporales, pero les advierto de inmediato que deben
| Kurt | Acabo de dejar a mi gatita en casa con Marcus, no me gusta dejarla sola después de este día tan atareado, pero sé que estará bien, sin embargo, no puedo decir lo mismo de Hans, no sé qué se dijeron en ese breve momento que hablaron, espero que no haya metido la pata demasiado.Llegó al lugar donde está rápido gracias a que uno de los deltas que custodian la frontera lo vio.Lo encuentro descuartizando un puma, tiene varias heridas en todo su cuerpo, es obvio que dejo que el animal lo atacara.—No sabía que eras masoquista— me acerco a él con cautela.—Ella me tiene miedo— dice sin dejar de mirar el cadáver del puma.No pensé que se soltará tan rápido conmigo, supongo que está demasiado desesperado por desahogarse con alguien.—Es normal que se sienta intimidada, es una hembra híbrida de rango inferior, tú un macho puro de rango superior...— me interrumpe mientras niega.—Ella dijo que no puede ser posible, que yo no soy su compañero y que estoy equivocado—golpea el suelo— ¡S
| Neylan | —¿Quieres tener está conversación en privado o también deseas los consejos de...— ni siquiera sé cómo decirle.¿Suegra, la madre de Kurt o por su nombre?— la exlíder? — opto por su cargo anterior.—si no le molesta necesito toda la ayuda posible— admite, no me mira a los ojos, supongo que el tema le avergüenza.—Buenos días— nos saluda Amara con una gran sonrisa.Solo me limito a sonreír forzado por unos pocos segundos antes de volver a mi expresión sería y observar a Hans.— ¿Interrumpo algo? —pregunta de inmediato al ver que estamos sentados uno enfrente del otro.—No, puede tomar asiento ya Kurt traerá el desayuno— respondo sin mirarla mucho.Tiene puesto un vestido, eso es lo único que sé, ella se sienta en un sillón individual cerca de Hans, yo suspiro al sentir como mi estómago se revuelve y ruego porque no me den arcadas frente a ellos.—Le estaba comentando a la Líder si podía darme consejos, acabo de encontrar a mi compañera— los ojos de Amara se iluminan.—¡Feli
| Neylan | Observo detenidamente los movimientos de ellos, supongo que ambos tienen el mismo control de su cuerpo, me tenso cuando él se arrodilla enfrente de mí, su cabeza queda a la altura de mu abdomen, por alguna razón siento un revoltijo en mi vientre al tenerlo de esta forma, lo veo de un ángulo inusual, su linda cabellera, su cabello se ve liso en la raíz y ondulado en las puntas, el condenado tiene un cabello hermoso, dejo de prestar atención a eso cuando siento sus dedos ásperos, clavo mis uñas en la parte blanda de la camilla, algo dentro de mí me dice que lo aleje, como si él pudiera lastimar a mi bebe, pero eso es imposible, sin embargo no es la primera vez que siento esta sensación, cada vez que alguien o algo esta cerca de mi abdomen o lo roza siento la obligación de apartarme. — Kurt... — ni siquiera puedo articular una frase, mis ojos se llenan de lagrimas sin ninguna explicación lógica. Él levanta su cabeza y de inmediato aleja sus manos de mi bebe para llevarlas a
| Neylan |Camino casi trotando detrás del delta, se que hay otros ocultos custodiándome, seguro Kurt se enojara mucho por esto, pero no hablamos de cualquier persona. ¡Es Marcus quien esta herido!De solo imaginarlo mi estomago se me revuelve, no tiene a nadie, al parecer nunca lo ha tenido, nunca lo escuchado hablar de su familia ni de donde viene, ni siquiera se si nació en este estado. Se lo que es despertar en un hospital sin nadie a tu lado mientras estas desorientado y herido, ademas de solo, la peor sensación es cuando recuerdas que nadie vendrá, que nadie esta preocupado por ti. Al menos yo no lo sentí cada vez que salía lastimada por mi trabajo, mi madre venia si estaba en mi país, pero cuando las misiones eran en otros paises o continentes ella obviamente no iba a poder venir y casi nunca le decía cuando esta en el hospital para no preocuparla. Sonrío cuando logro ver el hospital a lo lejos, sin pensarlo corro rebasando al delta que me protege, llego a una velocidad inc
| Kurt | Gruño cuando otro roger clava sus dientes en una de mis patas, pero sin pensarlo aprovecho que es mi pata delantera y muerdo su yugular, terminando con su vida en cuestión de segundos. Miro a mi alrededor, al parecer está todo limpio, acabamos de eliminar la amenaza, sin embargo, eso no me deja tranquilo ya que cierta gatita salió de la seguridad de nuestro hogar, no la mande a encerrar porque no quiero problemas ni discusiones, cualquier emoción negativa puede afectar su cuerpo, además ya estaba cerca de terminar aquí. Le doy un par de órdenes a mis guerreros y me regreso al hospital, no fue un buen día, no lo digo por el ataque, eso es lo que menos me importa en este momento, me preocupa las dos conversaciones que tendré en pocos minutos. Al llegar me transformo volviendo a mi forma humana, la recepcionista me trae una toalla corta y le agradezco, normalmente no nos importa tapar nuestra desnudes, sobre todo al ser machos, pero cuando formamos un vínculo ya sea la marca
| Neylan | Ayer después de que dejamos a Marcus solo, Kurt me trajo a la casa, pero solo unos pocos minutos después tuvo que irse, ahora sé que Marcus lo ayudaba bastante. Cada cosa que pase, cada decisión debe ser supervisada y aprobada por él, antes Marcus se encargaba de eso, ya tienen tiempo juntos y sabe lo que a Kurt le gusta y acepta. Hoy se tuvo que ir temprano sin ni siquiera desayunar y me pidió casi ordeno que no visitará a Marcus hoy, que él se haría cargo, además de que lo llevaría personalmente a su primera cita con un psicólogo, eso me alegra, ninguno de los dos podría ayudarlo tanto como un especialista. Me siento un poco mal por Kurt, tiene mucha presión ahora y aún se ve algo molesto, haré algo cuando llegue para animarlo, al menos me dejó ayudarlo revisando el correo que le llega del Concejo, no sabía que todas las semanas reciban correspondencia de ellos. En general dicen lo que pasa con su raza, mencionan algunas disputas entre manadas importantes que pueden
| Kurt | Gruño dando estocadas nada suaves a su tierno interior, sus garritas abren mi piel, en vez de sentir dolor solo es gasolina para el maldito incendio de lujuria y placer en el que estoy sumergido, joder cada estocada, cada gemido contenido de ella es exquisito, su pecho rebotando al ritmo de mis estocadas. Aprieto sus muslos tal vez dejando pequeñas marcas rojas en su piel, pero en este momento el deseo me nubla la razón, y las constantes contracciones de sus paredes alrededor de mi miembro no ayudan, ella me lleva al limito, al borde del placer y la locura, trago grueso cuando suelta un pequeño chillido felino y se corre. —Eso fue tierno. ¡Quiero que lo haga otra vez! — Albert toma control sobre mi cuerpo. Ella tiene la mala costumbre de cerrar los ojos cuando siente placer, salgo de ella bajo el control de Albert, ella suelta un pequeño gruñido de protesta, está acostumbrada a que siga taladrando su terso interior. Es algo complicado moverse en un lugar tan pequeño como l