El beta, se sentía muy inútil de no poder ponerse de pié para unirse a su Alfa, en el pelea y no poder defender a su mate como correspondía, solo pudo tomarla de la mano para tratar de calmarla nadie sabía a ciencia cierta que pasaría ahí realmente, pero lo que si sabía y conocía, era el lobo poderoso y guerrero que era Alexander Ivanov, él no se las dejaría fácil de ganar—El beta enemigo Alen, se quedó sorprendido al ver al rey de las manadas en el hospital junto a los lobos heridos que tenían órdenes de matar— ¿Se te perdió algo, lobo? ¿a quien vienes a buscar? — la imponente voz del Alfa rey, dejaba saber a la manada enemiga que si intentaban algo, nobles iba a perdonar la vida, pero ya no podían retractarse, si lo hacían Caín mismo les cortaría la garganta — Qué sorpresa Alfa, el matarte aquí le va ahorrar muchas molestias al Alfa Caín y a la psicópata esa de la Valquiria, ¿qué les haces a las mujeres? esa semidiosa está loca por ti, tanto que si no eres de ella prefiere verte
La forma en la que el imponente Alfa Alexander Ivanov, mató al beta y mano derecha del miserable Alfa Caín, fue lo más sanguinario, horripilante y sadi o que Temperace, alguna vez hubiese visto en su vida, en su carrera como traumatóloga había visto demasiados casos con mucha sangre y miembros mutilados o casi por desprenderse del cuerpo, pero nada como ver a un hombre abominable lobo destrozar la garganta de otro lobo y herirlo tan despiadadamente, eso había sido demasiado para ella— Temperace, estaba demasiado adolorida, la barriga le sangraba y el miedo que sentía la sobrepasaba, su mente colapsó y cayó inconciente al piso, habia sido demasiado para soportar para ella—Un gruñido de dolor retumbó en la gran sala el gran lobo Luken, daba paso al Imponente cuerpo del Alfa Alexander, apenas terminó bde cambiar, se apresuró a tomar entre sus brazos a su luna— ¡Temperace, mi amor! no, no, no, ¿qué te pasa mi luna? — el Alfa, estaba desesperado, se descontroló aún más cuándo la mano qu
El Alfa Caín, estaba tan furioso como hace cientos de años no lo estaba, le habían matado a su mano derecha, esa era una baja que sería muy difícil de remplazar, Alen, era un lobo al que le podía confiar su vida, con quién había ganado miles de batallas y conquistado cientos de manadas a su paso, pero pese a esa gran pérdida, el lobo enfermo de poder, no iba a parar— Al beta Igori, le atendieron las heridas de nuevo, ya se encontraba en una habitación donde estaba más cómodo, sobre todo por los cuidados de su mate Clarisa, el beta de estaba recuperando mucho más rápido que antes— En la habitación donde Temperace, fue llevada, Alexander, que ya se encontraba vestido en ropa casual, estaba al lado de su luna y de su cachorro, la embarazada doctora, de quiso mover apenas despertó pero sintió de inmediato el dolor y ardor de sus heridas — ¡Auucch....! ¿que me pasó?— No te muevas Temperace, estás un poco herida de la barriga, pero estás bien y el cachorro también, están a salvo ahora, de
Llegar al extremo frío país de Rusia, fue un cambio enorme para los médicos que estaban acostumbrados a un clima cálido, salir de paseo a la playa a comer pizza y tomar unas cervezas cuando no estaban de guardia— Antes de bajar del avión, el Alfa hizo vestir a Temperace, con un hermoso abrigo que la cubriría del frío, le puso el.mismo unos guantes y un lindo gorro a juego, todo era hecho por una prestigiosa marca que lo vestía a élTe vez muy hermosa, cariño, pareces una osa de peluche — dijo el Alfa, mientras abrazaba a Temperace por detrás de la espalda— ¿Me estás diciendo gorda verdad? éste cachorrito me hace comer demasiado, no es mi culpa que parezca una luna llena, la bella doctora hizo un lindo puchero — Eres perfecta para mí, de hecho me gustas mucho embarazada, voy a hacer que permanezcas la mayor parte del tiempo así — el Alfa, le susurró al oído a su luna, haciéndola sonrojar— ¡Ni siquiera lo pienses Ivanov, no te voy a estar pariendo un cachorro por año! no podría con t
Josep, todavía no entendía del todo lo que le había pasado allá afuera, lo que se sabía era que en adelante tendría más respeto por el bosque y por el inclemente frío de Rusia, por un momento pensó que moriría congelado— ¿Cómo te atreves a andar de ojo alegre mirando los cuerpos desnudos de las lobas? ¡¿ese es el ejemplo que da el Alfa, de la manada?! — Temperace, estaba bastante celosa, salió de la habitación de Josep, y se encerró en la suya— Creo que tendrás una noche difícil amigo — Igori, habló guardándose la risa— Tú no vendes piñas ¿eh? — el Alfa, dirigió su mirada a la enfadada y celosa Clarisa, quién seguía revisando la intravenosa de su amigo— Con su permiso,— de pronto apareció por la puerta la bella peliroja Julieta, la delta de la manada traía entre sus manos una charola con una sopa de verduras con pollo, fruta picada y jugo de manzana, ella venía a hablar con JosepAlfa, Igori, ¿me permiten hablar un momento a solas con el doctor? tengo algo muy importante que decir
Ya en el comedor, El Alfa, el beta y la delta , compartían sus estados de ánimo, no a todos les había ido bien por la noche, sus parejas destinadas si se lo proponían podían llegar a ser muy testarutas y un molesto dolor de cabeza— Que barbaridad, Alexander, parecer mapache en lugar de un lobo, con esas ojeras que te cargas, se ve que no pegaste un ojo en toda la noche, seguro que la doctora Rodríguez, te hecho de la habitación — el beta Igori, que estaba bastante sonriente, estaba molestando a su Alfa—¿puedes creerlo? ¡esa mujercita me echó de mi propia habitación, y lo peor es que no puedo castigarla cómo quisiera por qué está a muy poco de que el cachorro nazca, no quiero complicarle el embarazo! ¿y tú por qué estás sonriendo tanto? ¿acaso tú y tu mate..?— ¡Brujooo! ¡mi amada mate y yo, por fin hemos sellado el vínculo he pasado la noche más alucinante de mi vida, ella me dejó marcarla, Clarisa es completamente mía! — el apuesto beta, no podía estar más felizUn gruñido de moles
A la bella delta, le tocó hacer de enamorada colegiala, las flores , chocolates y cartitas, se veían llegar a la mansión, su mate Josep, se emocionaba casa que veía llegar un detalle enviado por ella, eso ponía feliz a la fiera brava de Julieta, nunca había sido tan romántica y detallista como ahora la estaba volviendo su pareja destinada y aunque no lo admitía, lo estaba disfrutandoEse día, estaban teniendo una junta importante, los enemigos que habían permanecido muy calmados, estaban haciendo ruido de nuevo, eso no significaba otra cosa que se avecinaba un ataque, debían estar prevenidos para lo que se venía Los lobos entrenados para vigilar a los enemigos estaban ahí con el Alfa rey, tenían una información muy importante que darle—Alfa, todo este tiempo hemos tenido lobos infiltrados en la manada del Alfa Caín, sabemos que va a venir por usted, por su luna y su cachorro, los quiere muertos, ese demente lobo no se va a detener con esta guerra Además, desde que usted y la Valquir
Temperace, se encontraba leyendo un libro de medicina en un cómodo sofá, el Alfa la observó y no pudo más que maravillarse por la eterna escena, ella estaba ahí en una bata con transparencias, sus delicadas y bellas facciones que el sol bañaba con sus rayos y su vientre abultado por llevar a su cachorro, era mafia pura— Cariño, ¿cómo te sientes? ¿qué tal de ha portado el cachorro hoy? — el Alfa de acercó a besar suavemente los labios de su luna, mientras acariciaba a su cachorro— Tu hijo no deja de patearme, tiene demasiada fuerza para ser solo un bebé... Alexander, ¿de que hablaban en esa junta a puerta cerrada? ¿debo preocuparme por el futuro?— Aahh, no te mentiré Temperace, nos han llegado noticias de Caín, es desquiciado lobo quiere nuestras vidas para seguir conquistando manadas a diestra y siniestra, lo que se viene no es nada sencillo, lo que viste en el hospital es nada en comparación a lo que va a pasar, debes ser valiente cuando llegue ese día, si muero...— ¡No, no puede