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30-Las consecuencias de mis palabras...
Después de cenar, mi Nana aprovechó para contarle a Adam muchas anécdotas de mi adolescencia, y para mí desgracia, escogió las más vergonzosas.-Buscaré el álbum de fotos para que veas a Elisabeth cuando era pequeña-Dice con demasiado entusiasmo, y mi alarma de peligro se activó.-¡Ni hablar!, no es necesario aburrir a Adam con fotos antiguas.-Yo quiero verlas-Me informa en voz baja cerca de la oreja.-¡¿Que quieres ver mi habitación?!, por supuesto-Me pongo de pie-Te la puedo mostrar sin ningún problema.-No Elisabeth, yo no he...-Claro, claro-Lo interrumpo-No tienes que insistir, vamos de una vez.-Le mostrarás tu habitación, o quieres que él te enseñe su estetoscopio-Habla mi Nana entre dientes y toma lentamente un sorbo de su vaso mientras mira hacia otro lado.-¿Mi estetoscopio?, ¿te sientes mal?-Me pregunta mi inocente y dulce Adam, con expresión preocupada-Lo dejé en el auto, puedo ir por el-Se levanta.-Yo me siento excelente, la que habló de tu estetoscopio fue ella-Señalo
31-Prometo darte todos los detalles…
-Yo congelándome afuera y tu tardas en abrir la puerta-Le reclamo a Cristal en tanto entro a su casa-No comprendo porque el clima tiene que ser tan impredecible estos días, ayer calor, hoy frio, ya parece mi estabilidad emocional…-No escuchaba el timbre, si me hubieses avisado que vendrías te habría esperado.-Si, si, a lo que vine-Me quito mi enorme abrigo y ella lo toma para colgarlo-Necesito tu opinión profesional-Saco una carpeta de mi cartera y tomo las páginas que traía dentro-¿Qué piensas de estos nuevos diseños?-Elisabeth, ¿Desde cuándo yo soy diseñadora profesional?-No es que seas diseñadora, tonta, eres una amiga profesional y tu opinión siempre es fundamental.-Caramba-Se muestra halagada-Que bueno que admites que mi opinión te importa.-Por supuesto que si… ahora responde, esto es importante-Le extiendo los papeles y ella los toma.Pasa las paginas una por una y su expresión es bastante buena.-Me gustan, no, de hecho, me encantan. Son fantásticos, te felicito.-Esa es
32-Es lo ultimo que recuerdo...
Llegue al hospital en un santiamén…El corazón me latía con bastante rapidez, por una mezcla de adrenalina y emoción. Bajé del auto y crucé las puertas caminando como una super modelo en una pasarela.Me siento tan increíble que debería anunciar que soy la novia de Adam, en lugar de inventar que soy una paciente, aunque ese es un asunto que sería mejor discutir primero con él.-Buen día-Me saluda una mujer que se encuentra tras un enorme escritorio-¿En qué le puedo servir?-Hola… busco al doctor Adam-Fui directo al punto.-Él director Miller no atiende pacientes, ¿Quiere que la remita con otro especialista que si este pasando consultas?-No, yo vine a ver a Adam.-Señorita…-Me observa de arriba abajo con una repentina mirada de fastidio-Estoy cansada de explicarle a las chicas como usted, que el doctor Miller no atiende pacientes desde que se convirtió en el director, al menos de que se trate de algún caso especial, o que él, lo autorice.Hubo una pequeña parte en toda esa explicación
33-¿Acaso escuché bien?
¿En qué momento me fui a dormir?, ¿Por qué tanta oscuridad?, no creo estar soñando porque los sueños no son dolorosos y ahora mismo siento como si alguien hubiese aplastado la mitad de mi cuerpo...Intento desesperadamente averiguar que sucede y hay mucho ruido a mi alrededor que no me deja concentrarme, personas hablando, o más bien dando órdenes, un molesto pitido sonando desde alguna parte y siento como mi cuerpo es traslado en algo con ruedas, una camilla quizás, pero, ¿Qué rayos pasó?, no logro recordar.Fui abriendo lentamente los párpados y el blanco segador de unas lámparas me obligó a pestañear reiteradamente.-¡Elisabeth!, ¡¿Puedes oírme?!-El desespero en la voz de Adam, me ayudó a volver en sí.Traté de buscar su rostro y no lograba agudizar mi vista, intenté mover la cabeza y una especie de collarín me lo impide."Que alguien me quité ésta cosa", quise gritar y mi lengua se había vuelto tan pesada que no me lo permitió.Alguien toma mi brazo izquierdo y con solo moverlo un
34-Qué buena actriz resulto ser Nancy.
Tantas personas en este hospital, tantas personas en este mundo, y justo tenía que ser él...-¿Qué haces aquí?-Inquiero con indiferencia.-No hay duda de que eres increíble, Elisabeth, acabas de tener un accidente y aún así preguntas qué hago aquí, ¿Se te olvidó que soy tu padre?Me observa con seriedad y por más que intento encontrar una pizca de preocupación en sus ojos no la consigo, como no quiere que le haga ese tipo de preguntas.-Parece que es a tí, a quien se le olvida que tiene una hija-Susurro por lo bajo, prácticamente para mí misma.Vuelvo la mirada hacia Adam y le suplico en un murmullo "No quiero que esté aquí, por favor haz que salga". Y fué entonces cuando noté su expresión, podría jurar que estaba petrificado, mirando a mi padre como si fuese un fantasma, sinceramente me preocupé un poco, ¿Acaso es porque no esperaba conocerlo en estás circunstancias?, tampoco es para tanto.-¿Que sucede Adam?-Quise saber.-Director Miller-Interviene Eleazar-Le agradezco mucho que hay
35-Yo jamás te dejaré sola...
ADAM-¿No es peligroso que te venga a recoger a tu casa?-Le pregunto Elisabeth, al instante en el que se sube a mi auto-Deberíamos tener mas cuidado.-No me digas que le temes a mi padre.-Por supuesto que no, lo que temo es generarte algún problema con él.-Te aseguro que eso es lo que menos me importa, aunque de igual forma puedes estar tranquilo, está en un viaje de negocios-Sonríe a labios cerrados, una sonrisa, que extrañamente, no me resulta sincera-Así que ya, vámonos de una vez.-Ummm... Te dije que no es recomendable que asistas a ese evento, aun deberías guardar reposo.-Y yo te dije que ya me encuentro excelente, además no es cualquier evento, por fin mis diseños estarán en una pasarela. ¿Tienes la más mínima idea de cuanto esperé este momento?, no me lo perdería ni por que me vuelvan a tropellar aquí mismo.-No digas esas cosas... Ya me diste un buen susto aquella vez.-Y pasé suficiente tiempo en el hospital recuperándome de un simple raspón en el brazo, así que deja de s
36-Esta humillación no la voy a dejar pasar...
ELISABETH.-¡Si pudieron venir!-Exclamé emocionada cuando note la presencia de Cristal y de su esposo en el lugar, justo en los asientos que mande a apartar para ellos, al lado de los nuestros por supuesto.Nos acercamos a saludar y apenas me senté, mi amiga se inclinó para susurrarme al oído "Pensé que no vendrían, ya me tenías preocupada".-Lo importante es que ya estamos aquí-Le respondí con simpleza, y le mostré una sonrisa a labios cerrados, puesto que no tenía tiempo para dar demasiadas explicaciones, ya el evento estaba a punto de iniciar."Justo a tiempo"-Pensé, al ver a la mismísima Carolina Venetty pararse en el medio de la pasarela con un micrófono en la mano y un vestido que le queda de infarto.Agradeció la presencia de todos esta noche, y luego de una bienvenida bastante formal, y de unas cortas palabras, dio inicio al desfile, el cual fue sorpresivamente encabezado por ella puesto que la prenda que traía puesta es lo principal de la colección que presentará hoy.-No hay
37--No tiene nada que ver con lo nuestro...
-¿Ahora sí me dirás qué sucede o tengo que adivinar?-Pregunta Adam cuando entramos a su apartamento.No respondí, solo caminé hacia el sofá, tiré mis cosas y en un simple movimiento, me quite el vestido que traía puesto, quedándome únicamente con mis panties.Se acerca a mí y yo aprovecho para lanzarmele encima, tomándolo por sorpresa, aunque es bastante ágil porque me sostiene de inmediato por la parte de atrás de mis muslos, quedando mis piernas enrolladas alrededor de su cuerpo.-Cógeme-Es lo único que le pido antes de besarlo con bastante intensidad, pero él aleja su rostro.-Elisabeth, esto es serio, tu actitud me preocupa, mejor hablemos...-Te lo contaré todo, si primero me haces tuya.Sus ojos me miran determinantes, por un segundo pensé que se negaría, pero eso es algo imposible, el nunca se negaría a hacerme el amor.Me toma de la cadera con ambas manos y me aprieta contra su cuerpo para empezar a besarme. "Vamos a la habitación" me dice entre besos y yo niego levemente con