Su cuerpo se envolvía de una energía azul por completo, un azul celeste más claro que el cielo,era casi blanca. Y empezó a ver imágenes, como si adelantara el video de una película, buscó y vio muchos momentos hermosos con su amiga ,sus amigos del orfanato, la escuela y la universidad. Momentos tristes, pero que eran parte de ella, su vida. Anhelaba volver a tener todo eso y buscaría la forma de arreglarlo todo, un nuevo comienzo para todos, reescribiria de ser necesario toda su vida. Se despertó sobresaltada y sentándose en su cama encendió la luz. ● Donde estoy, es mi habitación?- se preguntaba así misma. ●Acaso todo habrá sido un sueño? No, eso es… es imposible, lo viví todo, sentí el dolor, el miedo, el terror correr por mis manos, las atrocidades que cometió esa mujer,lo sentí todo en cuerpo y alma. Se decía a sí misma frustrada, angustiada y muy confundida, se suponía que debería haber vuelto al pasado pero parec
Al siguiente día Electra estaba como un zombi, tenía unas ojeras enormes y demasiado visibles, se levantó además tarde y llamó a su lugar de trabajo para informarle que no asistiría. Todos encontraron aquello muy extraño, es que ella era una joven adicta al trabajo que hasta asistía aunque estuviera enferma, así que por eso en ese momento Hanna y Derek la veian con cara de poker y como si tuviera monos en la cara, además del genio que se cargaba esa mañana. –Díganme que me veo terrible, pero ya no vean con esa cara, me tienen hastiada.- le reclamó a ambos y suspirando se sentó en la alacena de la cocina. –Electra, en serio amiga dime, te encuentras bien. - pregunto preocupada Hanna, Electra voteo los ojos y suspiró profundamente y miró a Hanna de reojo y tomó una taza de té y fijo su vista en la taza mientras jugueteaba con ella –Lo estoy, solo estoy cansada. - Hanna no le creía ni una palabra, sabía que algo se traía entre manos
PUNTO DE VISTA DE JAMES James estaba hasta el cuello de trabajo y para colmo también tenía que lidiar con su sobrino Nathan, tenía que recogerlo del colegio porque supuestamente su hermana no podía ir por el. Necesitaba con urgencia una asistente personal, la chica que era su secretaria se había enfermado de pronto y no tenía más ayuda que la de la señora Dennis. Mientras colgaba una llamada tocaron la puerta del otro lado de la puerta –Pase!- autorizó el sin detenerse a ver quien era. –Señor, ya casi serán las 12, necesita que vaya alguien por su sobrino?- le preguntó la señora Dennis. James suspiró y maldijo para sus adentro, había olvidado que tenía que buscarlo a medio día, el tiempo pasó y ni siquiera se dio cuenta. –Gracias señora Dennis, pero sabes como es ese niño. Iré yo por él. Cancela mis reuniones del resto de la tarde, es posible que me tarde.- –C
El timbre de la puerta sonó unas horas después de haber terminado algunos pendientes liberándose de una carga de trabajo ya casi a las 5 de la tarde. Y además había enviado pa descripción de su compañera para que el detective Adams se pusiera a trabajar en su búsqueda –Debe ser sophy, ya vino por su incordio de hijo. Ambos van a acabar conmigo.- pensó en voz altaEn ese momento la puerta de su despacho se abrió de repente. Dejando ver a tres hombres que parecía adolescente y la señora Ana detrás tratando hacerse espacio entre ellos–Joven James, no me dejaron avisarle, solo se me vinieron encima, par de brutos.La señora Ana estaba molesta, y empujaba a los tres para poderlos quitar del medio.Eran sus amigos lo que estaban ahí delante de la señora Ana, siempre le hacían eso. James estaba sonriendo al recordar aquellos tiempos, pero ahora los 4 tenían demasiado problemas de trabajo y de mujeres a la vez.–Dile que no nos regañe James, ya nos conoces vie
En el autobús pensaba que porque se sintió tan extraña cuando iba a ser atropellada, sintió su corazón latir con fuerza y se sintio muy mal cuando el bus areanco para irse, ademas pensaba que posiblemente Isabella la tuviera en la mira pero aún no podía distinguir entre presencia y sentirse vigilada, siempre sintió esa sensación pero nunca dio con los que la seguían Su estómago de repente le gruñó, estaba pidiendo alimentos y ya eran más de la 1 y ella no había comido nada, decidió detenerse en una tienda de alimentos asiáticos y ella amaba su comida. Salió del bus y entró a dicha tienda para comer algo. Pidió unos ramen y un platillo llamado Mandu, era especie de lo que conocemos como domplins pero rellenos de carne y preparada con verduras, la famosa sopa de mandu guk. La verdad es que tenía mucha hambre y se lo acabo todo, pago la cuenta y salió del lugar para volver a casa. Llegando a casa corrió a tomar e
Electra sintió cómo el corazón le latía con fuerza mientras James se acercaba, sus labios casi rozando los de ella. El mundo a su alrededor se desvanecía, y todo lo que importaba era ese momento. Pero justo cuando estaban a punto de sellar la conexión, un estruendo resonó detrás de ellos.–Hanna— pregunto con urgencias Electra y saltándose del agarre de James corrió hacia la sala quitándolo de la puerta –Eres un desgraciado infeliz, debería de matarte ahora mismo— Hanna había golpeado a Derek y seguía haciendo mientras el lloraba al ver su rechazo.–Nena escucha, yo.. –Tú qué, me has estado usando para venirme con esa ... estupidez?–Hanna?— llamó su atención con precaución Electra –Tú...eres una ...mala amiga, desagradecida. Te aliaste con este tonto para esa estupidez— Hanna se paro y agarró el cabello fuerte, sentía que la cabeza le quería estallar— un hombre lobo, que idiotez es esa, creen que vivo en un maldito mundo de fantasía, haaa no me digan tamb
Electra observó las caras de incredulidad ante su revelación. Hanna, aún tambaleándose de la sorpresa, se sostuvo del sofá, mientras Derek y James intercambiaban miradas de confusión y alarma.–Electra, has perdido la cordura. Vienes del futuro, donde está mi amiga entonces—preguntó Hanna en forma de reproche, era totalmente estupido creer algo cono eso–Hanna, se que es difícil, soy yo Electra tu amiga. Decidí volver a reiniciar nuestras vidas, no podía quedarme viendo como los… no podia solo quedarme de brazos cruzados—James y Derek estaban que no lo creian, el poder de esa ave Fénix siempre fue un peligro y cualquiera que naciera con ese poder sería observado por el consejo de magos desde su nacimiento hasta morir y no sólo eso, sino que una vez cumpliera la mayoría de edad, que es cuando el ave despierta, sería sellado nuevamente y así sucedería cada vez que sintieran peligro. James se acercó a Electra y tomó sus manos, si el ave estaba por despertar lo rechazaría y
El ambiente en la sala era denso, cargado de tensión. Electra, aún con el rastro de lágrimas en su rostro, se levantó lentamente. La determinación que la caracterizaba volvió a encenderse en sus ojos mientras se acercaba al ventanal, contemplando el vasto paisaje más allá del pequeño departamento. Cerró los ojos, tratando de sentir la presencia de aquellos magos que, alguna vez, fueron sus aliados.–Tenemos una semana –murmuró Electra, como si intentara convencerse a sí misma–. En ese tiempo, debemos hacer todo lo posible para adelantarnos a Gwyddyon.Derek, observándola con cautela, se cruzó de brazos.–Si solo tenemos una semana, ¿por dónde empezamos? Buscar ese artefacto suena a una misión suicida si ni siquiera sabemos dónde está o cómo activarlo y cómo se ve.–Primero debemos reunir a los demás –respondió Electra con firmeza–. Y luego, llegar a Ebrerton. El artefacto se activará con mi poder James y Derek intercambiaron miradas incr