Seit, después de dejar a Marco encargarse de Walter, Jhon y los otros cuatro, se dirigió al orfanato. De camino le dio indicaciones a Martin, para que mandara llamara a uno de sus hombres, indicándole que dejarán ir a Rhobert, advirtiendo que no diga nada sobre su persona y sobre lo que sucedió el día de hoy.

Después de resolver todo, Seit y Martin ya habían llegado cerca del orfanato, acompañado con algunos de sus hombres, se estacionaron a unas cuadras, para no llamar la atención, una de las reglas era mantener un perfil bajo, y bajando del vehículo, Seit le dijo a Martin: dime Mart, cuales son los preparativos para el día de hoy.

Para Clara y los niños del orfanato, Martin White era solo un simple contratista que trabajaba en obras de construcción, una persona amable, que desde hace dos años y medio a estado pendiente de algunas d