LINEA DELGADA

Muy temprano en la mañana, Alexandra se despierta después de un día lleno de sorpresas, sabía que su regreso solo podía propiciar el caos.

Abre la ventana y toma un poco de aire observando los horizontes del pueblo que la vio nacer, en su nariz se golpeaban los olores de jazmín con los que creció desde niña y que fueron privados de su olfato por dos años.

Abajo, en el jardín está Matías y Cassandra hablando plenamente, ella se muestra coqueta con el.

No puede negar que desde el primer momento le atrajo todo lo que su compañía le dijo de el, Cassandra se siente feliz al saber que él será su esposo.

Matías observa el balcón donde está Alexandra, tiene una larga trenza con su cabellera, una bata de dormir blanca, y por primera vez la ve como la recuerda, la mujer limpia que está en su cabeza.

— Perdona a Alexandra, mi padre la ha protegido demasiado desde que fue vendida y creo que no se da cuenta que sigue siendo una Omega o peor que eso una esclava — Cassandra observa con