La princesa Alana, regresó a su alcoba, para darle espacio a Hasim, en realidad ella nunca lo había visto así, pero al llegar a su alcoba sonrió al ver que ese tonto mago había traído su hermoso vestido, a los pocos minutos de haberse quedado solo, Hasim reacciono y se alejó a su alcoba para tratar de revisar el libro mágico a ver si podía descifrar ese presentimiento tan oscuro que giraba en torno a la princesa, para esto tenía que transportarse por un portal hacia la torre mágica, pensó en ir rápido y volver, ya que cuando estuviera allí su conexión con la princesa se rompería momentáneamente, pero él sentía que no podía esperar ni un segundo más, porque algo grave sucedería, de igual manera pensó que ella estaría en la iglesia y estaba protegida por todos sus seres queridos, así que sin perder más tiempo se tele transportó.

La princesa comenzó a arreglarse y a vestirse, cuando estaba lista bajo y se encontró con su padre que estaba de pie en la escalera esperándola para salir a la