Suzie se mordió los labios y no pudo evitar llorar.

Lucas la miró y su rostro frío reveló una rara dulzura. “¿Qué ocurre? ¿No puedes soportar dejar ir a mami? No te preocupes, mami nos seguirá queriendo tanto como antes”.

“No me mientas. Mamá y el Tío Wesley definitivamente nos darán hermanos menores en el futuro. Mami no nos querrá tanto entonces”.

Suzie sollozó y murmuró en voz baja, sintiéndose muy incómoda.

Aunque el Tío Wesley era muy bueno con ella, no era su verdadero papá.

Todo era culpa de su asqueroso papá. ¿Por qué era tan estúpido? Ella ya le había dado pistas, pero aun no llegaba.

No importa, mami ya estaba casada. Tenía que aceptar la realidad.

“Eso no sucederá”. Lucas frunció sus delgados labios y agarró la pequeña mano de ella. “Mami no es ese tipo de persona y tú siempre serás mi hermana pequeña. Te consentiré”.

“Lucas…”, Suzie volvió a llorar. Después de vivir tres años, esta era la primera vez que Lucas decía palabras tan cálidas.

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Después de la