Shaun devoró la pasta de una sola vez, pero todavía tenía hambre.

Caminó hacia el baño solo para encontrar a Catherine lavando su ropa en el lavabo. Pensándolo bien, él decidió irse.

El hombre pasó por una calle muy transitada y vio un restaurante especializado en pasta. Entró y ordenó del menú, pero escupió la comida después de un bocado. “La pasta que haces sabe horrible”, él gritó con enojo.

“¿Viniste a buscar pelea?”. El dueño de la tienda se volvió loco. “He dirigido mi restaurante durante más de una década y todos aquí adoran mi pasta. Eres el primero que se queja”.

“Eso es correcto. La pasta aquí es la mejor de todo el barrio”. Uno de los clientes no pudo evitar decir.

“...”.

Shaun no supo qué decir.

¿Qué le había hecho Catherine a su apetito?

¿Qué importaba si el dueño había dirigido el restaurante durante más de una década? El hecho era que la comida que hizo Catherine sabía mejor.

...

Villa junto al mar.

Sarah lo saludó mientras traía puesta lencería sexy. Parecía