Shaun fue tomado por sorpresa. Soltó a Catherine y retrocedió dos pasos. Le temblaban las manos y no parecía que fuera a parar.

Catherine lo miró con miedo. "Shaun, puede que no seas consciente de ello, pero siempre tengo que ser cautelosa cuando estoy contigo. Eres pretencioso, intimidante y poco razonable. Me preocupa constantemente hacerte enojar. Para mí, eres un demonio. ¡¿Has visto a alguien enamorarse de un demonio?!".

"Basta… ¡Ya para!".

Con los ojos enrojecidos, Shaun tiró todo el desayuno de la mesa al suelo.

Él no tenía intención de hacerle daño a ella, pero ¿por qué ella tenía que provocarlo de esta manera?

Como humano, también le dolía el corazón.

Cuando estaba a punto de perder el control de sí mismo, abrió la puerta con fuerza y salió de la casa.

Se apresuró tambaleándose hacia el coche y tomó enseguida la medicina del frasco. Sin embargo, eso no fue suficiente para él. Temiendo que le haría daño a los demás, sacó con fuerza una cuchilla y se cortó en el brazo.