"¿Qué tú me gustas mucho?". La reacción de Willie fue como si hubiera escuchado una broma. "Te metiste en mi cama a pesar de tener novio. ¿Crees que me importas un bledo? No eres diferente de las p*tas de ahí afuera".

Una bofetada aterrizó en su mejilla, pero esta vez, parecía haber aterrizado también en su corazón.

Rebecca casi pierde el equilibrio.

Había un buen número de personas a su alrededor, incluyendo empleados y accionistas de Hudson. La situación había provocado un alboroto entre ellos, y la miraban con desprecio.

"No esperaba que fuera ese tipo de persona. Antes de esto, me daba la impresión de ser pura y noble".

"Sí. Muchos hombres de la empresa la trataban como una diosa".

"Por suerte, no se la presenté a mi hijo. Ella es realmente desvergonzada".

"...".

En medio de la constante humillación, el rostro de Rebecca palideció. Se había esforzado tanto en construir una reputación envidiable, y sin embargo todo se había destruido en un momento.

Como su padre, Jeffery t