“Nathan no quiere participar en esto, y la familia Hill tiene secretos sobre él. Como es una disputa personal, no hay necesidad de causar disturbios sociales”, dijo Titus con honestidad. Además, tenía una impresión favorable de Catherine.

Sheryl resopló. “Si ese es el caso, ¿cuándo podré vengar a mi madre y Rebecca? Si no puedes hacerlo o no quieres, lo haré yo misma. Todavía hay ciertas cosas que puedo manejar sin ti”.

A Titus le parecieron esas palabras desagradables. “Sherry, si quieres ocuparte de Shaun y Catherine rápidamente, todo lo que puedes hacer es presionar a Nathan. Sé qué métodos planeas usar. Eso causará una agitación global, y es realmente innecesario llegar a ese extremo”.

“Supongo que no quieres lidiar con ellos. ¿Es porque conociste a Catherine? No puedes soportar hacerle daño, ¿eh?”. Sheryl de repente se burló de él y dijo: “Se parece mucho a mí cuando era más joven”.

Titus se sorprendió. Mirando a la fría mujer en la cama que se negaba a creerle, de repente sin