Comienzo a llorar a mares, las luces estaban pagadas acercó algunos pañuelos que están enfrente de mí en una mesita de madera, trato de secar mis lágrimas.

—Pero no llores Mía— Escucho la voz de Kyler cerca de mí abrazándome.

—Es triste todo esto— Digo aún llorando a mares.

—Pero si es una película de The Avengers— Dice él tratando de tener paciencia, acariciando mi mejilla.

—Pero es que no ves que murió Ironman y La viuda negra —Trato de estar tranquila— Es duro.

Él ríe fuertemente, se inclina un poco hacia atrás, mira fijamente el techo, tomo un cojín y se lo lanzó encima.

—No me maltrate he— Me observa mientras sigo sollozando— Tan solo me dio algo de risa.

—Soy sincera, como es posible que mueran, ellos merecían tanto— Él me observa detenidamente y con su mano limpia mis lágrimas.

—Termínenos de ver la película — Asiento con la cabeza.

Me acomodo en el sofá y pasa su brazo por mis hombros, apoyo mi cabeza en el suyo, él me ha dado una tranquilidad en este momento, termino de ver la película y como cotufas, bueno las segunda que hice, ya que las primeras fueron un desastre, creo que fue un error en terminar de ver la película, el llanto volvió y él solo me observaba hasta que decide hablar.

—¿Ahora que te dolió?— Sollozo y hago puchero, él solo sonríe.

—No vez que le dejo dicho yo te amo 3000— Suspiró— ¿Además quién cuidara a la pequeña?

—Su madre, creo que heredaron mucho para eso— Suspiró más tranquila— Pero para que estés más tranquila imagínate que tendrá al hombre araña a su lado como un hermano mayor.

—Ya debo irme— Digo mirando la hora en el reloj que tiene en su muñeca.

—¿Tan rápido?— Se acomoda en el sofá.

—Son las 8 P.m, pasamos todo el día viendo películas— Le digo señalando le la hora.

—Está bien, pero cena conmigo primero— Me invita él con un tono dulce.

—¿Por qué haces esto? — Pregunto curiosa, me acomodó en el sofá para verlo fijamente en espera de su respuesta.

—¿A qué te refieres?— Me pregunta mirándome algo raro.

—Suspiro— Tan solo me conoces hace 24 horas, me has buscado en el hospital, has compartido conmigo— Él toma mi mano— No me conoces, eso es algo extraño.

—Me siento seguro a tu lado, hay algo en ti que me atrae— Acaricia mi mejilla con su mano libre— No lo sé, creo que está casa tan grande, tanto dinero, tanta fama, pero igual me siento solo, necesito una amiga.

—Está bien— Sonrío— Creo que también necesito un amigo.

—Bueno uno más en tu lista, creo que tienes muchos amigos— Niego con la cabeza— Bueno ahora tienes uno, puedes contar conmigo— Suena tan honesto.

No digo nada más, no creo tener que preocuparme por lo que diga mi padre, él siempre ha dicho que la mayoría de las personas se acercan a mí por una sencilla razón, acercarse a él.

Ha luchado tanto tiempo por su el puesto que tiene actualmente, por cumplir sus sueños, siento que en este momento una persona se está acercando a mí por quién soy, no solo por ser hija de Julián Stiller.

Kyler hasta el momento ha sido una buena persona que tiene unos lindos sentimientos, tenerlo en mi vida sería bueno, aunque siempre que hay muchas cosas que debe saber de mí, que tal vez lo podrían alejar, pedimos está vez un delivery.

—No puedo crees que de tantos restaurantes que te nombre — Sonríe al ver nuestro pedido en la mesa— Una hamburguesa y no de Macdonald

—Río— Oh, te dije que podías pedir lo que quisieras—Tomo mi hamburguesa y comienzo a comer.

—No estoy muy acostumbrado a comer comida rápida— Me Admite tomando su hamburguesa.

—Vamos no te voy a envenenar— Sonrió al verlo comer la hamburguesa — ¿Qué te parece?— Pregunto observando detenidamente, me siento como en esas películas que da una mirada tan intensa mientras espera que algo suceda.

—No está mal.

Sonrió, la verdad es que pasar el tiempo a su lado, hasta ahora no está nada mal, él me acompaña hasta mi casa, sonrió, él me ayuda a bajar del auto.

—¿Nos veremos mañana? —Me pregunta, mientras apoya su espalda en el auto, asiento y caminó en dirección a mi casa.

—Deben encontrarla ahora— Escucho a mi padre hablando con su personal de la seguridad.

— ¿A quién van a buscar papá?— Pregunto al acercarme a él y me abraza fuertemente— ¿Qué pasa?— Pregunto curiosa y sorprendida.

—A ti hija no fuiste a la universidad, no te pudimos encontrar y ahora— Si voz nuestra preocupación— Pusimos observar y no te has colocado tu tratamiento.

—Papá— Susurro y él se separa un poco de mí.

—Déjenme ahora solo con mi hija, necesito hablar con ella—Le dice a todo su personal y ellos de inmediato se alejan, menos mi madre.

—Mía tu padre tiene razón, no puedes desaparecer así como sin nada, sin dejar rastro, no sabes cuántas personas malas hay en este mundo— Se acerca a mí— Cuántas personas querrán hacerle daño a tu padre, además— Suspira y agrega— Además nos prometiste que cuidarías de ti, tu tratamiento es importante debes de entenderlos.

—Lo sé mamá, papá yo me cuidaré más lo prometo.

Sonrió, les doy un beso a ambos en la mejilla y él alejo a mi habitación, la verdad es que en muchas oportunidades mis padres pueden parecer fríos, loco, pero a su manera siempre me han protegido, a su manera mis padres han cuidado de mí.

Mi madre desde muy joven se casó con mi padre, más que todo porque sospechaba de un embarazo, ella piensa que no lo sé, pero mi abuela me lo ha contado.

Es una mujer que emprendedora, ella sola ha logrado estar donde estar, ser una de las mejores diseñadoras y ex modelo, desde que mi padre entro en la política ella tuvo que dejar su cartera como modelo, sé que mi madre a su manera me ama aunque le cueste demostrarlo.

Mi padre siempre ha soñado trabajar en la política, como lo hace actualmente, ayudar a los más necesitados, sé que tiene un carácter fuerte, sé que ha querido lo mejor para mí, desde que enfermé mi padre siempre ha hecho mil cosas por cumplir mis deseos, mis sueños, por verme feliz.

—Ay mía— Digo para mi misma mientras observo el techo— Mañana tienes clases, pero —Me siento por un momento en la cama y tomo mi peluche del pato Donald— Como es posible Donald que aún sabiendo que mis padres me quieren, siento este vacío tan grande en mí y que cuando me siento así aparezca está persona en mi vida, ¿Es una locura no?

Río al recordar que tenía la misma maña de pequeña de hablarle a Donald, rápidamente me acuesto, tengo mucha flojera, me duele el cuerpo, sé que mañana es un día largó, pero no puedo olvidar el abrazo de mi padre, la preocupación de mi madre y sobre todo la sonrisa de Kyler.

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Mil gracias por darle está nueva oportunidad a esta increíble Historia.

Gracias mis fantasmitas por su apoyo incondicional, días tras día trato de realizar un capitulo con amor para ustedes.