Lamento no haber subido capítulo, según mi cabeza loca ya lo había hecho y cuando reviso resulta que siempre no. perdonen a su escritora loca
36 AlaricMi hermana era una loba hermosa, pero nunca salía de su habitación, su pálida piel y su cabello tan oscuro como el ébano era la envidia de más de una en esta manada, me gustaría que pudiera salir de ese caparazón que armó a su alrededor.Era por mi hermana por quien me apresuré a venir a la manada Garra Plateada, con estos ataques ella menos saldrá de su habitación—Dime, Alaric ¿escuché bien? —me dijo algo nerviosa.—Sí, hermanita encontré a mi compañera. Ya quiero que la conozcas —le dije emocionado. —Te mereces eso y más —la miré más relajada— ya quiero ver pequeños cachorros corriendo por toda la casa.—Yo también, aunque como le dije a Cleo es algo complicado —l e traté de explicar vagamente— pero luego te digo más, primero quiero bañarme e irla a visitar.—Entonces ve, salúdala de mi parte —me dice con un brillo que no había visto en sus ojos— ¿crees que le caiga bien?—No lo creo… Estoy segurísimo —le dije contento de poder bromear un poco con ella.—¡Alaric! —golpeó
37. Narrador omnipresente—¡Mamá, papá hablen ya! —pidió Mason desesperado.—Creemos que Adara está embarazada —dijo Eva con una sonrisa enorme en su rostro— ¡seremos abuelos! —¿Qué? —pregunta Mason.Alaric se queda callado y Adara un poco pálida, Mason aun no puede creer lo que su madre decía.—Es normal en estos casos —dijo Eva como si nada.—¿Estos casos? —pregunta Adara asustada por las palabras de Eva.—Claro, ustedes han estado juntos. Eso se nota en una loba, sus olores están impregnados en ti —explica Ulises con total calma.—No he sido marcada —intenta explicar.—No hace falta, bueno si hace falta para que ningún otro lobo te vea y los humanos no te noten demasiado —a clara Eva— es por eso que una marca se lleva con orgullo.—Ella no puede estar embarazada —dijo Mason despacio— no hubo nudo… al menos no de mi parte ¿y tú?La pregunta de Mason recae en Alaric y todos los ojos de la mesa se van directo encima de la cabeza de Adara.Alaric no entendía porque tenía que platicar
38 Mason —No sé qué diablos te sucede —dijo mi padre, apenas controlando su enojo cuando Adara y Alaric salieron del salón. Yo tampoco sabía que me llevó a decir esas cosas, pero no quería perderla. —Pensé que te había criado mejor que eso —reclama mi madre con un dejo de tristeza. —Si Alaric la embarazó se la va a llevar, la elección ya está hecha —dictaminé terco con el miedo corroyendo por mis venas. —Ella es una loba única en su especie. Nunca he visto a nadie que pueda tener dos mates —me dijo mi padre suspirando— ¿Por qué la diosa le daría dos mates si debe elegir entre ellos? —¡No lo sé! —grité enojado conmigo mismo. Malaquías estaba tan enojado conmigo que dejó de hablarme y sentía que una daga atravesaba mi pecho. «La voy a perder» pensé para mí. Me sentía tan devastado, casi como si hubiera perdido una extremidad. Había pasado días maravillosos con ella, no me veía dejando todo eso. —No des, nada por sentado con esa loba —pidió mi madre— por cierto… ¿Cómo es como l
39 Santa Mi hija y el alfa pasaron a mi sala mientras cerraba la puerta con temor, quería con todas mis fuerzas que Adara no fuera la loba de la profecía, pero sabía en lo más profundo de mi corazón que eso no era posible que se me cumpliera. —Todavía falta alguien —les dije mientras llegaba hasta donde estaban ellos. —¿Quién falta? —pregunta mi hija hundiendo el ceño. —Tu otro compañero, hija —le dije lo más calmada que pude estar con esta situación. —Yo… —miró al suelo avergonzada por ese hecho. Si tan solo ella se hubiera dejado marcar por otro lobo, tal vez esto no estaría pasando y la vida de mi hija fuera más sencilla, como una omega normal. «No es una omega normal, es nuestra Luna y reina» me refuta mi loba Hellig. La diosa juega con nosotros, a veces no sé si es una deidad o un demonio que juega con sus propios hijos. «Pero, quería que ella estuviera bien, con una vida más normal» le repliqué y mejor corté la conexión con ella. Hellig nunca estuvo contenta con las dec
40 MasonSanta me miró con confianza al hablar, no mentía o al menos creía que todo lo que decía era cierto.—Lo sabemos y es por eso que nosotros no podemos decir nada, fuimos simples omegas al llegar aquí y no quise poner en peligro la vida de Gerónimo —contesta ella muy segura—. Él estaba empeñado en huir fuera de la montaña y tal vez refugiarnos entre los humanos, pero lo mataron cuando lo intentó.Las palabras de Santa estaban llenas de amargura y dolor, aun a pesar de los años que ya habían pasado.—Mamá… —Adara se veía confundida.—Sí, hija lo sé. No queríamos decirte, pero tú no eres una loba común —dijo Santa tomando sus propias manos encima de la mesa— tu crecimiento no fue como el de otros lobos, y allí tu padre y yo nos dimos cuenta que eras la de la profecía. Había que alejarte de los vampiros a como dé lugar.La sangre de los lobos para los vampiros era un elixir que no pueden controlar, si l que dice Santa es cierto, la sangre de Adara es más que un elixir para los chup
41 AdaraMi madre dice que soy una Knigth y una loba especial, aún no puedo creer eso.«Es verdad, debes creerle a tu madre» me dijo mi loba muy segura.«Nunca me dijiste nada sobre eso» le reclamé.«Quería que estuvieras segura» me respondió Aroa.«¿Estoy segura ahora?» le pregunté enojada por los secretos.«Debemos confiar en nuestros compañeros, juntos somos irrompibles» me explica.—Adara, vamos —me dijo Alaric— debemos preparar tu viaje, aquí ya no estas segura.Alaric se veía consternado por toda la información en tan poco tiempo.—En tu manada ha habido ataques, allí tampoco es seguro llevarla —replica Mason.No quería más peleas entre ellos, me hería profundamente verlos de esa manera.—Quiero ir a Garra Plateada —respondí yo está vez.No entendía porque Mason se ponía de esta manera.Mi madre había quedado relegada al olvido mientras nosotros discutíamos.—Mason, para ya —pide Alaric suspirando.—Ya no quiero más peleas, pensé que lo habías aceptado. Que me habías aceptado, a
42 Alaric.Queríamos postre y ese postre nos veía con mirada inocente que me ponía la polla más dura.Saber que mi cachorro crecía en su vientre me hacía cosas inexplicables en el cuerpo, ni siquiera hizo falta anudarla para que quedara embarazada. Había escuchado de que podía suceder, es normal que un beta o alfa puedan embarazar hasta a una humana sin necesidad de anudarla, pero que el embarazo de Adara fuera diferente, que estuviera hecho para ambos, me daba mucha tranquilidad.Nuestra rivalidad debería terminar aquí.Solo quería llevar a Adara a nuestra habitación y sentirla.«¡No!» Lainus se enojó y gritó en mi mente dejándome sordo.«¿Por qué no?» me sentía contrariado e irritado por su comportamiento.«Debes velar primero por su salud, bruto» me reclama mi lobo.Enlacé a Mason y se lo comenté, me dijo que su lobo pensaba lo mismo así que desistí de comerme a mi pequeña loba, cuando el doctor dijera que estaba perfectamente bien ella y nuestro bebé podríamos…Mi lobo gruñó enoja
43 AdaraMe sentía como en las nubes y cuando desperté, me levanté con una sola mano notando que solo uno de mis mates estaba conmigo, mi corazón se estrujó al no encontrar a Mason a mi lado, pensé que las cosas se habían solucionado con todo lo que mi madre nos contó, pero al parecer para él no es suficiente.Y eso me dolía demasiado.Quería que esto que le brindaba la Diosa fuera suficiente para él, pero creo que para él es más importante que sea solo suya a compartir este lazo.—¿En qué piensas? —pregunta Alaric con voz ronca por el sueño.Miré hacia abajo y allí estaba él con una sonrisa somnolienta, acarició mi mejilla y me incliné a su tacto sin poder ni querer evitarlo, nuestra conexión era vibrante por el vínculo que compartíamos.—Quiero conocer tu manada —le dije en vez de decirle lo de Mason.Me miró un momento antes de suspirar, sabía que no quería hablar ahora.—Podemos irnos cuando quieras —contesta tranquilo en vez de presionarme.Me gustaría estar marcada para que sint