Noah al ver al niño sentado esperando su respuesta intentó mantener la calma para que se le ocurriera una excusa creíble para estar allí, sin embargo terminó diciendo lo primero que se le vino a la mente, — Hola pequeño, estaba buscando a tu madre para confirmarle que les llevaré al colegio antes de ir a trabajar, supongo que está en la cocina, ¿Verdad?

— Sí, ella está preparando el desayuno, pero una pregunta, ¿por qué nos va a llevar usted si ella tiene un vehículo?

— Entiendo que lo llevarán a hacerle mantenimiento — , estaba mintiendo como un bellaco pero ya no había vuelta atrás.

— ¿Ya se encuentra mejor?

— ¿A qué te refieres?

— A que mi madre fue a llevarle la cena y me dijo que regresó tarde a la habitación porque usted se sentía mal

— Ah…, sí ya me siento mejor, la comida tiene la capacidad de reconfortar el alma y mejorar la salud.

El niño lo miró con cara de incredulidad lo cual no le pasó desapercibido a su padre y luego hablo, — Vale señor, que bueno que mi madre lo