Jade no dijo nada, solo lo vio, tratando de descifrar si le decía la verdad o solo la estaba engañando, lo vio en silencio ir y venir por la amplia habitación, escucho como era llanada una bañadera, y se relajó ante el aroma tan delicioso que salía de lo que suponía era el baño.— Jade. — solo cuando escucho la voz de Loan fue que descubrió que había cerrado sus ojos, no se había dormido, pero ese delicioso aroma que se esparcía por el lugar la había relajado a tal punto que su mente había quedado en blanco. — Hare ingresar a las manitas…— ¿Manitas?— Son como las sirvientas en américa, ellas se ocuparán de bañarte y curar tu cuerpo…— Puedo hacerlo yo…— No, no puedes. — Loan respiro con pesar, sabía que sería todo muy complicado a partir de ese momento, no solo debía decirle que sería su esposa y eso era algo que no estaba en discusión si queria regresar a estados unidos, sino que era enseñarle una cultura nueva y muy antigua a la joven, pues si bien estaban en Pais X y en una era
Jade paso gran parte de la noche pensando cuales eran sus opciones y que debía hacer, definitivamente escapar no estaba a su alcance, no solo estaba en otro país, ella estaba en otro continente, en un lugar donde ni siquiera manejaba el idioma y por lo poco que había visto, los Zhao tenían poder en Chicago, y por lo que Loan le aseguro, ellos eran dueños de media Pais X, su única opción era aguardar a que Javier hiciera lo posible por encontrarla teniendo en cuenta y rezando a cuanto Dios se le ocurriera que continuara con vida, pero eso tampoco era garantía de nada, quería confiar en quien era su mejor amigo y el responsable de que ella estuviera metida en semejante problema pudiera salvarla, pero Javier era una persona común y corriente, entonces… todo recaía en ella, debía reconocer y aceptar de una vez por todas que estaba sola en el mundo.— Todo depende de ti Jade, solo de ti.Suspiro ahora si sintiendo el cansancio de la droga que Wang le había suministrado, pero también rela
Tenía miedo, tanto que no podía pensar, solo veía las cosas pasar frente a ella y fue cuando se dio cuenta que estaba caminando una vez más, no comprendía porque no lloraba, o así sea temblaba de miedo, quizás era porque Loan la llevaba de la mano, no se sentía como cuando Javier la tomaba, ni cuando eran amigos, ni luego, cuando lo arruinaron siendo novios, estaba tomada de la mano de un extraño, pero se sentía tan segura, como cuando Isaías la llevaba al parque de pequeña.—Bueno días, les voy a pedir que a partir de este momento hablen en inglés. — dijo con voz profunda Loan, cuando llegaron a un comedor, donde había tres hombres y una mujer, además de un par de empleados, Jade sonrió viéndolo, sabía que lo hacía porque un rato antes ella había bufado al no comprender lo que las manitas decían.— ¿Por respeto a tu novia? — indago Sakura, y Jade pudo detectar en su voz el mismo tono que Magnolia usaba cuando la menospreciaba frente a los demás, su padre, Javier, los vecinos e inclus
El desayuno continuo por varios minutos, en los cuales le informaron a la pareja de “novios” que Park se ocuparía de darle clases de chino a Jade, mientras que Loan se ponía al corriente con todo lo que al negocio familiar correspondía.Hubo un lapso de tensión, cuando el patriarca de los Zhao indago sobre su familia, y Jade dijo que era huérfana, Loan la vio con confusión, eso no era lo que ella le había contado, aun así, permaneció en silencio, no discutiría con Jade frente a los demás. Sakura sonrió lista para llamar a los custodios y que Sug diera la orden de matarla, una huérfana no tenía oportunidad alguna ni para ser concubina y Sakura lo sabía.— Bien creo que eso es todo… por ahora. — informo Sug y su actual esposa lo vio con molestia.— ¿No dirás nada? La americana es huérfana.
Javier veía el techo blanco del hospital, no esperaba visita alguna, pues sabía bien que la única persona que podría preocuparse por su bienestar no estaba en la ciudad, ni siquiera en el país ¿y como sabia aquello? Fácil, Loan Zhao, había ordenado que personas del clan Tigre Blanco le notificaran que Jade estaba bien, que desde que había pisado Pais X estaba bajo su cuidado, el próximo líder del clan y eso ocurriría porque la rubia que él conocía de toda la vida se casaría con el oriental.La enfermera que ingreso en ese momento cortándole todo pensamiento, le comunico que ya estaba dado de alta, luego de preguntarle si todo estaba en orden, ya que desde que fue ingresado, Javier no había demostrado más que dolor por sus heridas, sin embargo ahora, lo veía llorar, lagrimas pesadas y silenciosas, la enfermera que era una mujer mayor, supo que esas lagrimas eran de pena y no de dolor, aun así el joven se las arreglo para decir que todo estaba en orden, los matones que lo habían visitad
— ¿Acaso has castigado a Jade? — Loan casi bufa al comentario de su padre, tenia ganas de decirle que, si él había aguantado tanto de Sakura y nunca la había maltratado, ¿Qué le hacía pensar que, lastimaría a la mujer con la que se desposaría? Era ridículo.— Por supuesto que no y te pedí que hablaras en inglés, Jade se siente incomoda al no entender nuestra lengua. — Sug apretó sus labio y luego le hizo una seña a su hijo, para que abandonara la habitación, algo que al joven no le gusto.— Jade no se siente bien debo cuidarla…— Para eso están la manitas, déjame hablar con mi futura nuera. — declaro ingresando en la habitación y Jade se apresuro a quitar los restos de lagrimas de su rostro y a ponerse de pie.— Luego si quieres la llevo a tu hogar, ahora es mejor que…— No lo pienso repetir Loan, aun soy el tigre en estas tierras. — la rubia se tenso al ver la mirada con la que Sug veía a su hijo.— ¿Qué sucede? ¿están discutiendo? ¿Es por lo que le dije a Wang? si es por eso lo lame
Javier limpio una vez más el mármol en el cual estaba el nombre de Renger Isaías, solo cuando la piedra quedo brillante, se permitió ver la foto del hombre que no solo lo había ayudado cuando quedo huérfano, Isaías fue la única persona, además de Jade, que confió en él, aun sabiendo que ese moreno alto e imponente ya no podía hacerle nada, sentía vergüenza de solo ver su foto.— Te falle, siempre nos dijiste a Jade y a mí, que debíamos ser positivos, que, si nos centrábamos en lo bueno de la vida, esta seria mejor, pero no puedo, te jure que la cuidaría, pero no lo hice, y ahora no está, la perdí Isaías, perdí a tu hermosa Jade y no se que hacer para recuperarla.La pena del rubio era tan grande que sus lagrimas comenzaron a caer una vez más, ni siquiera cuando visitaba la tumba de sus padres sentía aquel dolor.— ¿Eres el hijo de Isaías y Magnolia? — la voz de hombre lo sobre salto, luego de colocarse de pie vio al hombre vestido de negro y de cabello cano, no era familiar de Isaías,
Y así fue, lo que tenia que pasar paso, Loan lo esperaba furioso, incluso tenia su Jian en la mano, algo que hizo que los hombres que aun obedecían a Sug, desenfundaran sus armas. Pero de un rápido movimiento, Loan corto las manos de dos de ellos, dejando paralizados a los otros tres.— ¡¿Qué haces?! — lo increpo Sug al ver como dejaba lisiados a dos de sus mejores hombres.— Les advierto. — rebatió viendo a los otros tres. — En una semana tomare tu lugar ¡es lo que deseabas y es lo que tendrás! Pero… desde este momento, solo yo soy dueño de mi destino, y ese es proteger a mi esposa.— Ellos solo estaban cuidando de mí, su jefe…— Ya no, yo soy el jefe, tengo al tigre en mi espalda…— ¡Y puedo despellejarte si así lo deseo!— Es lo que esperaba que dijeras. — Loan agito su Jian y Sug retrocedió dos pasos.— ¡Loan! — advirtió viéndolo con temor, aunque sabia que no era su destino morir por su hijo.— La deje contigo por respeto. — recrimino lleno de furia. — La cuide durante una semana