— Veo que mi palabra no te sirve—— No es eso, pero Serenety han pasado muchas cosas—— Caleb déjalo, si me crees tan rastrera para intentar colarte a una hija es que me tienes poca estima. Sabes he conseguido sobrevivir siete meses sin tí. Puedo seguir haciéndolo, no quiero complicarte la vida—— Pero...—— Pero nada, me tengo que marchar a bañar a Luz, si quieres puedes venir a cenar pero no te voy a ofrecer mi cama por lo que tendrás que dormir en la pensión—El da un gruñido y sus ojos se vuelven dorados.— Lo siento lobito, habla con tú humano yo no voy a cambiar de opinión—Después de esas palabras me doy la vuelta y vuelvo a casa. Una lágrima rueda por mi mejilla, me siento estúpida. Me prometí no ser débil nunca más y no lo he cumplido. Sabía que esto podía pasar pero no me imaginé que pudiese doler tanto.Nunca pensé que el recuento con Caleb pudiese ser así, pero es lo que hay y yo poco puedo hacer, si él no quiere ver yo no me veo capaz de curarle la ceguera.No soy capaz d
Dos semanas han pasado desde la partida de Caleb y no ha pasado ni un solo día en el que mis pensamientos no fuesen suyos.En su ausencia me he ido a vivir a la casa que me ofreció la doctora, Isabella y Fede no estaban de acuerdo con mi decisión. Pero es algo que no iba a cambiar yo quería que ellos disfrutasen de su intimidad, bueno de su compañía y de sus besos.Ya que Fede había decidido respetarla hasta su mayoría de edad y hasta que ella se sintiera preparada, ella por desgracia solo había experimentado dolor y amargura con el sexo. Necesita amar y sentirse amada para dar ese paso. Estoy segura de que al lado de Fede lo logrará.Termino de trabajar, voy a comer con mi familia porque eso es lo que son, después de comer voy a entrenar junto a Fede, lo he pospuesto demasiado y no quiero volver a pasar por algo similar sin poder usar todas mis armas.Isabella también quiere aprender a defenderse pero ella entrena con Fede por las mañanas y por lo que me ha dicho Fede aprende muy ráp
Ha pasado casi un mes desde que ví a Serenety y a mi hija por última vez. Todavía me resulta tan extraño decir o pensar en la palabra hija. Se que he sido egoísta, nunca debí de dudar de ella. Bueno nunca lo hice la verdad es que me aterraba ser padre, por mucho que lo deseara no esperaba que todo pasase así. Y luego estaba lo que por primera vez en siglos la heredera era una mujer.Lo había imaginado tantas veces y todas ellas tan distintas. No me puedo imaginar lo que ha debido de sufrir, lo que ha debido de soportar y eso me irrita si cabe aún más. No he sido capaz de protegerla. Ella y mi hija han tenido que esconderse para sobrevivir.Está alimaña está mejor conectada de lo que esperaba, sabía que se trataba de alguien importante y con contactos pero no esperaba que estuviese rodeado de tanta seguridad.Hace dos semanas que tuvimos que pasarnos al bando del enemigo, si actualmente estamos encargados de su protección. El problema es que todavía estamos en un escalafón muy bajo. Lo
Adaptarse a esta nueva situación me estaba costando un poco más de lo que había pensado. Está bien, ya sabía lo que era que todos te mirarán y te respetarán. Bueno al menos un poco, ya que fui Luna o todavía lo era. Había pasado casi un año desde que desaparecí de la Manada.Me preguntaba cómo estaría la abuela? Al menos sabía que no estaba sola y tenía una casa en la que descansar. De la noche a la mañana había pasado de ser la enfermera de la comunidad a convertirme en su Alfa, al menos tenía a Fede a mi lado para ayudarme con los problemas que pudieran surgir.— Señora en la calle hay unos hombres que preguntan por usted— dice uno de los chicos que hacen de guardias.Esto es irrisorio no necesito tener guardía personal, pero tampoco quiero ser desconsiderada y mal educada.— Hazlos pasar—Podía haber preguntado quienes eran esos hombres y que querían. Al menos espero que no me traigan más problemas.Tocan la puerta y doy permiso para entrar, la puerta se abre y para mí sorpresa es
Y aquí estoy en un avión en dirección a Estados Unidos, pensé que sería más difícil salir del país, pero como ya nadie me busca, Caleb de que todos nuestros papeles estén en orden.Issa, Fede y el resto de la Manada vendrá a Estados Unidos en uno o dos meses. Cuando dije que me tenía que marchar todos dijeron que irían donde fuera yo. Así que se que pronto vendrán también.Caleb no me ha querido explicar el porque de nuestro viaje, bueno se que en algún momento había que volver claro está. Pero a qué tanta prisa, presiento que las cosas no están bien allí.Aún nos faltan ocho horas para llegar y si tan solo fuese eso... Una vez que tomemos tierra nos subiremos a una furgoneta. Y ahí ya no lo quiero no pensar serán otras cinco horas hasta que por fin lleguemos a casa.Caleb está dormido junto a Luz, en cambio yo no puedo conciliar el sueño. Estoy nerviosa y asustada no quiero dar explicaciones de mi ausencia y tengo miedo a que me rechacen por mi aspecto, bueno la cabeza la puedo cubri
Es extraño volver aquí y sentirme forastera, este se supone que es mi hogar y no me siento en casa...La Manada está muy tranquila, yo diría que más de lo que podría recordar, apenas si nos hemos cruzado con un par de personas y estás han corrido despavoridas.Caleb se marcha a casa y yo voy a ver a mi abuela. Llamo a la puerta y espero a que me abra, antes de marcharme puse la casa en venta pero no sé qué habrá pasado en mi ausencia.— No ves que no son horas de molestar!— dice un hombre gordo rascándose el trasero.— Lo siento, no pretendía molestar... Estoy buscando a mi...— no termino de hablar ya que soy interrumpida por ese señor.— Perdón Luna, no la había reconocido— dice agachando la cabeza.— No importa, sabe dónde vive mi abuela?—— Si claro, ella vive al lado de los tenderos, está cerca pero la puedo llevar si lo desea— dice mirando fijamente al bulto que se remueve en mis brazos.— No se preocupe, ya voy dando un paseo. Gracias y perdón por la molestia.—El señor cierta l
El reloj de la plaza da las doce, todo está en silencio. Las pocas personas que se han atrevido a venir están agolpadas en un rincón. El aire es espeso la atmósfera que rodea este momento está cargada. Mi corazón palpita con fuerza, mis piernas comienzan a fallar.Agradezco a la abuela por haberse quedado a Luz en estos momentos. Sebastian hace acto de presencia lo acompaña una mujer morena de ojos rojos como la sangre y de un ser de más de dos metros de altura, no me atrevo a decir de qué especie puede tratarse, pero tengo claro que no se trata de algo que haya visto antes, quizás se trate de un troll o un gigante?Agarró con fuerza la mano de Caleb y el me mira con tristeza, donde ha quedado mi Alfa enfadado y rudo. Este parece estar ausente o asustado. Hay algo que no me ha contado de eso estoy segura, hay algo más detrás de todo esto.La mujer da un paso hacia delante e indica que deben acercarse los postulantes a Alfa, en estos momentos ya no hay ningún Alfa, el ganador se lo que
La leyenda de la brujaCuenta la leyenda que existió una mujer bellísima. Su cuerpo era delgado y lucía una piel dorada y tersa. Solía peinar su largo cabello negro en una suave trenza que resaltaba la hermosura de su rostro. Sin embargo, casi ningún hombre se le acercaba pues algo en ella inspiraba temor.La gente del pueblo decía que aquella mujer no era de fiar. ¿Y cómo podía serlo si su familia era conocida por practicar magia negra? Así que los muchachos recibían advertencias para mantenerse distantes y los adultos ni siquiera eran capaces de verla a los ojos.Pasó el tiempo y aquella muchacha se convirtió en mujer. A la par, también se fue quedando sola. Entonces, un enorme deseo comenzó a gestarse en su corazón: anhelaba tener un hijo. Estaba convencida de que sería una excelente madre. A pesar de que la gente no la quería, ella sería capaz de darle a su hijo la mejor crianza jamás soñada.Sin embargo, los años no perdonan así que comenzó a ver aquel sueño como algo lejano. En