—Liz, por favor. No le digas que te lo dije.

—Porqué habría de ayudarte a ti.

—Liz…

Decepciones y más decepciones es lo que recibo cuando me creo estúpidas ilusiones, obviamente solo van a suceder en mi cabeza, no en la realidad. Solo yo soy tan ingenua en creer en las palabras de ese hombre lobo

Debería estar a acostumbrada a estas decepciones, pero tal parece que Damián tiene más de mi que no veía, el quiere destruirme solo porque soy la gota de agua de esa mujer. Yo no soy así, jamás sería capaz de matar a alguien.

Entonces me detuve a pensar,… quiere hacerme la ilusión de que me ama, que caiga rendida en sus brazos y muera de amor por él y para eso fingirá que me ama. Entonces… porque no puedo usar eso también para al menos tener un recuerdo de que alguna vez… le gusté a un chico como él, el me usará pero también lo haré yo.

—Te estuve buscando. —dijo Damián cuando iba hacia el autobús —¿Nos vamos?.

Lo observo detenidamente buscando alguna respuesta afirmativa o negativa de