Luara corrió con muchas emociones fluyendo dentro de ella.

No creía que el destino pudiera ser tan cruel y dejarla nacer en una familia como la suya.

Cuando pensó que sería diferente, Clarissa quedó embarazada sólo del hombre que amaba.

Y esta no es la primera vez que esto sucede.

Ya había perdido la cuenta de cómo su hermana se había llevado todo lo que le gustaba.

Sin embargo, pensó que David no sería capaz de hacer tal cosa, pero aún así la dolió profundamente.

Estaba cansada de ser ignorada por sus padres todo el tiempo, y ni siquiera los invitó a la boda, porque existía la posibilidad de que no vinieran o las cosas de Clarissa cambiarían una vez más.

Davi va hacia Luara y la abraza.

Intenta liberarse más sin éxito.

"Te juro mi amor que no tengo nada que ver con que esa bruja esté embarazada. La única persona que tiene derecho a tener a mi hijo eres tú."

"Suéltame David, estoy cansado"

"Vamos mi amor, continúa nuestro matrimonio. No dejemos que esos dos idiotas arruinen nuestra