Capítulo 45

Ibiza

Lo sabía, sabía que algo no me daba buena espina desde el primer momento. Es que es mucha casualidad que justamente los demás no hayan llegado al muelle, cuando se supone que iba mucho más adelante que nosotros. Creo que es demasiado conveniente el hecho de dejarnos a los dos solos, pero si creen que así pasara algo entre nosotros están en un grave error y habrán hecho todo esto en vano.

Subo a la habitación y dejo escapar un suspiro pesado por lo frustrante que es esta situación, ya que por un lado la idea de estar a solas con Alejandro por algún motivo me gusta. Sin embargo, debo quitarme esa sensación de la cabeza y así dejaré de pensar en tonterías. Solamente le pido a Dios que me dé fuerzas para no volverme loca, debido a que aunque insista en ir con los demás, Alejandro no me va a llevar.

Una vez ya me encuentro arreglada, tomo mi pequeño bolso el cual combina con mi vestido amarillo y también con mis sandalias color carne. No es que haya tenido muchas ganas d