Con dolor en sus corazones, la familia del mafioso padre y sus tres pequeños trataba de continuar, todos con la esperanza de que Violet regresara pronto a darle alegría a sus vidas,

Alessandro se instaló en el despacho para trabajar junto con Darriel, ese día había desayunado todos juntos, los pequeños todavía en pijama, mientras que los dos adultos ya estaban vestidos formales en trajes costosos hechos a mano, una vez que terminaron el desayuno las niñeras se llevaron a los niños a vestir para comenzar el día,

Los dos mafiosos estaban muy ocupados resivando un fuerte cargamento que trasladarían a una distancia considerable, cuándo una manita estaba intentando abrir la puerta del despacho, Darriel alcanzó la manija abriendo para que él pequeño Adriano entrara, el adorable niño fue directo a Alessandro levantando sus pequeños brazos para que lo alzara, Alessandro por un momento no pudo reaccionar, hasta que por inercia levantó al pequeño y lo sentó en sus piernas, Adriano se quedó q