Corre a través de mí como como las drogas malas
—King Kavalier, Bad Drugs
L E I A
—Boyka.
—González.
—Siempre has sido un blandengue pero no puedo creerme que Liam también vaya a presentar su dimisión justamente ahora...
—Y tu siempre has sido una bruja así que es normal que no entiendas que cuando se mezcla trabajo y convivencia pueden surgir estas cosas porque sorpresa somos humanos, tenemos sentimientos por el resto de mortales—contrataca el rubio sin piedad sin si quiera dejarme terminar, le dedico una de mis peores miradas a modo de respuesta, mientras termino por dejar hablar en un susurro sus últimas palabras para acabar haciendo hincapié en bruja dedicándole una mueca—¿Es este tu mejor insulto?—pregunto finalmente.
—Muy madura como siempre, solo una arpía como tú es incapaz de
Soy un prisionero aquí, nunca me dejaran irme.— Raphael, Prisoner.—¿Quién es ella?—pregunta Mireia confundida apartándose de mi.—Ella es...El sonido de una explosión hace que ni siquiera pueda terminar, el pánico hace que los invitados empiecen a moverse de un lado para otro mientras los guardias sacan sus pistolas intentando calmar la situación.No puedo evitar buscar a Morgan con la mirada desesperada entre todo el personal.—¡Morgan!—grito sin poder evitarlo, pero es en vano, pues la segunda explosión mucho más letal silencia mi grito desgarrado. Entonces el pánico y la desesperación se combinan haciendo que empiece a dar vueltas por todo el lugar sin importarme tropezar con los invitados que quieren escapar lejos del caos que estaba a punto de presenciarse.La gran y majestuosa entrada es sellada e
No puedes escapar del peso de perder todo lo que amas.—Echos, Cross—No, Keegan. Ni lo pienses. Nos han echado. C'est fini, amigo. Finito—expresó Federico de mala manera, la preocupación, su dolor, pena y confusión era latente en sus palabras. A lo que no dudo en encogerme de hombros mientras le dedico mi mejor mueca de despreocupación.Finalmente salimos del coche, habíamos sido expulsados de la Isla Ross, los guardaespaldas se habían asegurado de vernos arrancar el coche de Federico, hasta llegar al otro bando. Donde otro grupo de hombres lo suficientemente armado como para servir en la guerra de Afganistán custodiaba la única entrada. Ahí estaban mirándonos de a bajo a arriba como si estuvieran dispuestos a volarnos los cesos al mínimo intento de caminar hacia ellos.—¿Des de cuando un Ross obedece las normas?—pregunto mientr
¿Qué vas a hacer cuando haya sangre en el agua?—Grandson, Blood&Water. A L I Y A H Caminé enloquecida de un lado a otro al ver un charco de sangre junto un trozo de vestido de Morgan. Ahogué un grito de dolor esperándome lo peor. Vi de reojo como los guardaespaldas intentaban con todas sus fuerzas poner orden entre los invitados en un intento de hacerles sobrevivir al caos que se había abierto. Las lagrimas invaden mi rostro cayendo encima del charco. —¡Aliyah!—la voz de Gina hace que mi corazón vuelva al cuerpo. Tal vez ella sabía algo de Morgan. No puedo evitar observarla con horror. Su estado era mucho peor que el mío. —Por favor, Aliyah. Haz algo. Van a matar a Héctor...—suplica ella con lágrimas en los ojos—Está herido de muerte y aun así no ha podido evitar ir a por Morgan, hija—añade desesperada. No dudo en acogerla en mis brazos en un necesitado abrazo. Su bello rostro está decorado por dos manchas que decora
Corre a través de mí como como las drogas malas.—King Kavalier, Bad Drugs—¡Aliyah!—grito cometiendo el fatal error de distraerme, Luigi se deshace de mi agarre a lo que una bala sale disparada a un lado, rebota contra el capo de uno de los tantos coches que había, para acabar para mi mala suerte disparándole a la rueda del coche de Héctor. Éste no se rinde y continua con su trayectoria a toda pastilla consiguiendo entrar en el puente.Ella me mira sin poner ninguna expresión. Pronto su mirada se posa encima del coche blindado de Héctor mirando la escena con horror. Pronto el coche derrapa y ella no duda en meterle un codazo a su atacante, para acabar corriendo desesperada hacia el coche.Tomo mi arma y no dudo en disparar sin ningún tipo de criterio, Matt, Rose, una de las desconocidas, y Dylan ven la oportunidad perfecta para propinar un par de golpes a
El mundo estaba en llamas y nadie podía salvarme excepto tú. Es extraño lo que el deseo hace que la gente tonta hagaNunca soñé que conocería a alguien como tú. Y nunca soñé que perdería a alguien como tú...— Ursine Vulpine, Wicked Game.K E E G A N—Bingo, son oficialmente las doce, espero que hayan conseguido llegar—sonrío con gratitud mirando a uno de los hombres que me apunta en la cabeza, este frunce el ceño incrédulo como quien mira a un hombre demente. No le culpo ni yo entiendo que está pasando.Lo único que puedo decir es que intento mantenerme firme como puedo. Nunca me había sentido tan feliz y a la vez tan miserable en una situación tan caótica como esta. No podía hacer nada excepto sonreír. Sentía que el niño que un día fui, inocente y de coraz&o
No tienes que lastimarte más,¿no escuchaste? la guerra terminóconversación con mi eco,toma un golpe y luego lo dejo,todo estará bien,bienvenido al paraíso...Donde tú y yo,siempre podemos escondernos,bienvenido al paraíso...— Grandson, Welcome to paradise.M O R G A N—¡Mireia!— el grito salió de mi garganta sin que pudiera hacer nada más que rezar por nosotras, las cuerdas estaban a punto de romperse, miro a la joven doctora quien no suelta el acelerador.— Esto va por ti, Fede, hijo de puta— suelta ella cuando las ruedas caen de nuevo en el suelo haciendo que mis ojos se salgan de órbita.— ¿Hemos sobrevivido?— pregunto llevándome una mano en el pecho.Ella me mira igual o más que sorprendida que yo.—De momento sí— s
A L I Y A H —¿No han encontrado su cuerpo?— pregunto sin poder esconder mi desesperación, Enzo baja la mirada serio. Eso solo hizo que algo dentro de mi se rompiera un poco más de lo que ya estaba. Estos últimos días habían sido horribles. Lo más semejante a un infierno. ¿Cómo debía continuar como si nada? — Lo siento, Aliyah. Ya sabes que han pasado mes...— Yo no lo olvido. Para mi cada día ha sido un maldito infierno— le interrumpo desesperada sin esconder mis lagrimas— ¿Han buscado en el agua? ¡Tal vez este ahí!— añado. Cualquier cosa era mejor que rendirme. Cualquier cosa era mejor que hacerme a la idea de no volver a ver a Keegan. Culquier cosa...— Aliyah ambos sabemos que eso implicaría que ya estuviese muerto— afirma él llevándose una mano a las gafas, por su mirada debí de haber interpretado que nada bueno saldría de esta conversación. — Entiéndeme Enzo, Keegan es...— él no me deja terminar. — Lo entiendo, te juro que lo entiendo, pero no podemos hacer nada— susur
M O R G A N—Morgan—la voz de mamá suena autoritaria, me empuja suavemente detrás de ella mientras su mirada sigue puesta en los cinco hombres que nos rodean.Yo los observo de mala manera deseando que en cualquier momento llegue papá. Para mi sorpresa, este llega, tiene herido el pecho, lo puedo ver a través de su traje, y por lo que puedo ver sangre en el labio. Mamá no tarda en mirarlo preocupada mientras yo trago saliva con fuerza al ver los hombres intercambiar un par de palabras entre cuchicheos con él.—¿Keegan? —pregunta mamá ladeando la cabeza confundida mientras este tan solo asiente con la cabeza en señal de que todo estaría bien.—Quemad la casa—sentencia, con aquella voz que se grabaría a fuego en mi mente en el paso de los años, finalmente sin sentimiento en la mirada y sin mirarnos si quiera a los ojos prosigue con sus actos. Yo no dudó en buscar a mamá con los ojos llorosos incrédula ante lo que estaba sucediendo, ella me abraza con fuerza mientras los hombres que nos