Capítulo 476
Traté de calmar al pequeño, tomándole la mano para tranquilizarlo.

Por suerte, mi hijo tenía un carácter alegre y era valiente. Bastaron unas palabras de mi tía, diciéndole que había comprado muchas cosas divertidas y deliciosas, para que dejara de resistirse.

Entramos a la habitación donde mi abuela estaba despierta.

Al ver a su bisnieto, mi abuela, a pesar de su debilidad, esbozó una sonrisa feliz y levantó la mano para indicarnos que nos acercáramos.

Mi tía llevó al niño junto a la cama. La mano huesuda de mi abuela tomó la manita blanca y tierna de mi hijo, una imagen impactante, como el legado y la continuidad de la vida.

Al observarlos, no pude evitar sentir un nudo en la garganta.

Acompañamos a mi abuela durante mucho tiempo, pero lamentablemente su salud empeoraba día a día. Después de menos de una hora despierta, sus fuerzas comenzaron a agotarse.

—Abuela, descanse ahora. Cuando despierte seguiremos jugando, tenemos muchos días por delante —la animé con dulzura, como quien con
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP