—¡Hey! ¡Déjalas!...—grita un chico alto, acompañado por otro grupo de amigos.
—¿Miguel?—pregunta Johanna, sorprendida de verlo ahí.Nataly voltea a ver a Johanna, sorprendidas de ver a Miguel. Alguien que fue amigo de ellas, cuando estaban en sus antiguos cuerpos.—Por favor, sólo charlábamos, Miguel... ademas, ¿qué haces por aquí?, habíamos dicho que para evitar problemas evitarás esta ruta...—responde el chico que sujeta a Johanna.—Déjalas ir... no seas aprovechado...—ordena Miguel.—¿O qué?—lo encara.—O esto se pondrá feo... y no hablo de ti—ríe.El chico intenta darle un golpe, Miguel rápidamente lo evade y le da un golpe en el estómago, él se agacha un poco y Miguel le un rodillazo en su rostro haciendo que caiga al suelo.—¡Viene la policía!—uno de los acompañantes del chico lo levantan del suelo y corren.Otro chico empuja a Nataly contra Johanna y corre.—Te dije que no era bueno venir... jamás creí que una chica tuviera que pasar por estas cosas...—le comenta a Nataly mientras se limpia le polvo y la ayuda a levantarse.—Eso es el pan de cada día, creo que no me quedaron ganas de venir...—responde Nataly.—¿Están bien?—pregunta Miguel mientras les ayuda a recoger las cosas que se pudieron caer al suelo.—Muchas gracias, Miguel...—¿Saben como me llamo?—se desconcierta. —Nunca las había visto por aquí y mucho menos las recuerdo—ríe él.—Am... sí. Es que.. tú sabes, compañeros de escuela o por f******k... así te conocimos...—responde Nataly con una risa nerviosa.—Más o menos te entendí...—ríe. —No es bueno caminar por estos terrenos, las pandillas qué hay aquí son peligrosas, como esos tipos. Algunos incluso son vendedores de droga pero a la policía no le importa...—agrega él mientras uno de sus acompañantes le entrega el bolso de Johanna.—Esto es tuyo..—le entrega el bolso a Johanna. —Ese chico te golpeó algo fuerte, tu mejilla está muy roja... demasiado—toca la mejilla de Nataly. —Puedo curarte...—Estoy bien, gracias—se sonroja. —Creo que ya debemos irnos... muchas gracias por ayudarnos...—toma a Johanna del brazo y piden un Uber.—Claro, chicas...—responde en un tono dulce.—Hasta luego...—agrega Johanna antes de subir al auto.El auto arranca y se dirigen a casa. —Ese tipo si te pego muy fuerte... y se nota demasiado en tu mejilla, solo esperemos que nuestros padres no lo noten—comenta Johanna mientras saca su maquillaje.—Tranquila, no estarán aún...—De igual forma puedo maquillarte un poco... así se disimula...—acerca la brocha.—No, estoy bien así, lo único es que me duele y me arde, al final de cuentas si fue mala idea venir. Ese estupido si me pego algo fuerte—contesta Nataly.—No tenemos la misma fuerza que cuando éramos hombres, agradezco que intentaras salvarme, pero fue algo arriesgado—comenta Johanna mientras guarda sus cosas y suspira mientras ve como su hermana de masajea su mejilla y brazo.—No lo digas así, suena un poco humillante, aunque sea verdad. Y da igual, tenía que hacer algo porque ese tipo te estaba tocando, hay que dar gracias que Miguel llegó, no creí que en esta realidad existiera...—baja un poco el vidrio para tomar algo de aire.—No es humillante, es normal. Aquí están todos, nada cambio, solamente nosotros... o en este caso, nosotras—Johanna toma su teléfono y responde unos mensajes.Nataly solo suspira mientras observa por la ventana.30 minutos después...Llegan a su destino, bajan del auto y ven el auto de su padre.—Parece que hoy llegó temprano...—apunta al auto.—Ay no, entremos, lo más seguro es que esté ocupado en la cocina y tal vez ni nos vea entrar...—responde Nataly.Caminan hacia la puerta principal de su casa y abren la puerta, lentamente la cierran y de pronto su padre aparece saliendo de la cocina.—Chicas, estaba...—observa la mejilla de Nataly. —¿Qué te paso?—pregunta mientras se acerca y toca la mejilla de Nataly, con preocupación.—Me caí... creo que es una de las desventajas de ser tez blanca, que algo como una caída se me noté... ¿no es así Johanna?—la mira, intentando desviar la atención hacia ella.—Si... como todo, ventajas y desventajas...—responde mientras ve a su padre tocar la mejilla de Nataly.—No, en serio, dime que sucedió... dudo que tu hermana te haya pegado, y no te caíste, esto parece más a que alguien te haya dado una bofetada...—la ve a los ojos con suma molestia.—Ay ya, pasamos por un lugar "peligroso" camino a casa, había un grupo de pervertidos, al parecer drogados, se nos acercaron, nos querían besar. Uno de ellos me tomó en sus brazos así que mi dulce hermana lo empujó y escupió... claramente el chico se molestó y le lanzó una cachetada... por suerte, unos amigos llegaron y los otros chicos se fueron corriendo, además que unos policías se acercaban... eso pasó—Johanna aclara la situación con un tono rápido que incluso su padre se pierde un poco.—¡¿Por qué carajos se fueron a pie?! Tienen las tarjetas para pagar el Uber, que tan difícil es eso... algo peor pudo haber pasado y ustedes parecen tomarlo tan a la ligera, son unas chicas que en cierto aspecto están indefensas...—¡No lo digas de esa forma!—interrumpe Nataly.El padre de ambas se queda un poco sorprendido por la exaltación de Nataly. —Es lo que son, unas chicas, quizás no indefensas, pero dime, si un chico no puede defenderse de un grupo de maleantes, ¿qué creen que podrán hacer ustedes? Le diré a su madre de esto...—responde molesto.Voltea a ver a Johanna. —desde luego, quiero que me digas donde fue y a qué hora... mañana enviaré a alguien a buscar y vigilar a esos chicos—agrega él.—Estoy muy molesto, no se cual es la necesidad de desviarse por ese camino, les dijimos que podían salir con sus amigos, no es tan difícil acatar esas reglas... durante las próximas dos semanas sólo podrán salir para ir a la escuela y volver, nos aseguraremos que cumplan...—las ve a ambas. —Y Nataly... nada de salidas con tu novio mientras estes castigada. Se tendrá que esperar hasta el domingo...—se retira molesto.—Si papá...—Nataly toma su mochila y sube.—Me parece un poco injusto... no volverá a pasar algo así, tranquilo...—Johanna protesta mientras su padre se dirige a la sala.—Lo ven como si no fuese algo tan malo... ya tome mi decisión. Y desde ahorita te aviso, cuando tengas novio, también quiero conocerlo primero—se sienta y abre su laptop.—Ahg... no puedo creer, que me esté pasando esto—sube las escaleras y se dirige a su cuarto con a Nataly.Ambas suben al cuarto, guardan sus mochilas y Nataly se coloca frente al espejo, revisando el color rojo de su mejilla. —Ay por favor, no se ve tanto...—exclama mientras se ve en el espejo.Johanna la ve —Lo que nuestro padre le molesta es que andábamos en un terreno peligroso... por eso se molestó tanto. Creo que nos ha dado tanta libertad y este incidente le hizo analizar de nuevo nuestra situación... adiós a permisos fáciles—ríe.—Tu teléfono está vibrando... ¿te lo doy? Puede ser importante...—Johanna toma el teléfono de Nataly.—Debe ser Karen... o Nicky... aunque lo dudo después del berrinche que me hizo por teléfono, no se que haré con ese niño...—baila los ojos y comenta con un tono sarcástico.Johanna ríe y le pasa el teléfono.Nataly lo toma. —Genial... es Nicky...—comenta mientras observa que su hermana ríe. ¿qué te da risa?...—pregunta antes de responder.—Tu forma de hablar y actuar—ríe. —Eso me causa risa...Nataly baila los ojos y suspira antes de responder.Nicky: Hola, ¿Nataly?Nataly: Soy su secretaria, es broma. Si, soy yo jajaNicky: Ahora entiendo porqué no querías que te llevara el día de hoy, tenías pensado irte con tu hermana a un barrio muy peligroso... ¿a quién ibas a ver?Nataly: ¿Qué? No sé de que hablas...Nicky: Si claro, Nataly. Un amigo te miro pasar por su privada, incluso me envió una foto. Es un chico al que le vendí droga, pero es de fiar. Oh y espera... esa no es la mejor parte... te siguió y te miro con un grupo de chicos...Nataly: Deben ser los chicos que nos acosaron y acorralaron...Nicky: ¿Qué? No... me dijo que estabas hablando con uno de ellos, luego llegó un Uber por ustedes... ¿como qué acosando?Nataly: Creo que esa parte no debías saberla...Nicky: Déjate de estupideces y dime quien las acoso...Nataly: Espera, espera... no me hables así o no te diré nada de lo que quieres saber...Nicky suspira.Nicky: Necesito saber, amor...Nataly: Un grupo de chicos nos siguieron... nos acosaron y después acorralaron. Tomaron a Johanna, yo empuje al chico que la tomo y la escupí... luego el me dio una cachetada, la cual dejó marca y encima me tiro sobre el suelo, después un grupo de chicos, llegaron y un conocido... lejano se podría decir... el nos ayudó y los chicos acosadores huyeron...Nicky: ¡¿Pero por qué estabas ahí?!Nataly: Tranquilo... solo acompañe a Johanna a buscar unas cosas, pero me quedo claro que no debo ir más para allá...Nicky: Mañana mismo iré a esa zona y buscaré a esos chicos, irás conmigo y me dirás quienes eran...Nataly: No, no haremos eso. Ya no quiero más problemas, Nicky. No volveré ir para allá...Nicky: Esta bien... ¿Tú estás bien?Nataly: Si, mi mejilla ya no se ve tan roja y... cambiando de tema a algo más amistoso. El domingo mi papá te espera, está muy ansioso por conocerte jaja...Nicky: Ay... fingiré actuar como un chico normal...—¡Nataly!—grita Paola desde la cocina.Nataly: Ay, es mi mamá...Nicky: Eso no suena bien jaja, hablamos luego...Cuelga la llamada y baja a la sala.—¿Mande? ¿Dónde estuviste?—pregunta mientras se acerca a ella.Nataly se sienta en la silla del comedor. —Mejor ve directo al regaño, ya sabes mi respuesta y papá te contó ya... evitémonos todo eso...—¿Y Johanna?—pregunta su madre.Johanna baja lentamente las escaleras y sonríe.—Aquí estoy...—camina Johanna hacia su hermana y con una mueca de disgusto.—¡¿Como se les ocurre irse solas a una colonia como esa?!, ¿Cual fue el motivo para ir? Están locas...—Fuimos a casa de una amiga pero no estaba... así que pues regresamos y creo que el resto de la historia ya la sabes...—se sienta en el sofá.—Se suponía que solo irían a la escuela, y si salían con amigas me avisarían, tú cuando no estás aquí, vas con tu novio...—contesta la madre, mientras Nataly y Johanna están sentadas escuchando sin chistar.—No volverá a pasar...—contesta Johanna cuando es interrumpida.—Claro que no volverá a pasar, estarán castigadas por 2 semanas, tal vez más...—interrumpe.—Nos alejamos un poco y ustedes se descontrolan... chicas, ¿qué les paso? Nunca habíamos tenido problemas por algo como esto, nunca desobedecían las reglas, lo hacían, pero no lo hacían yéndose de excursión...Johanna y Nataly se miran una a la otra.La charla termina, suben a la habitación para prepararse y darse una ducha. Después bajan a cenar y finalmente se acuestan. Nataly impaciente por lo que le espera el domingo y Johanna meditando la situación actual.Al día siguiente. Viernes.Nataly y Johanna van caminando hacia la salida de la escuela, pero Damián y Jacob las interceptan.—Oye, ¿irás a la fiesta?–pregunta Damian.Jacob sonríe. —Vamos Johanna se que irás... y tú también Nataly... son dos locas que no pueden faltar en la fiesta—ríe.—No, lo siento.. mi hermana y yo estaremos ocupadas... así que no podremos ir... hemos estado un poco apagadas—responde Johanna con una mueca de tristeza.—Vamos Johanna... habías dicho que sí... ah es cierto, están castigadas...—agrega Damian con una sonrisa.Nataly baila los ojos y Johanna se despiden, se dirigen al Uber y suben al auto.—¿Te sientes atraída por ese chico? Bueno... al menos no soy la única que se está volviendo loca en esta realidad...—Nataly se quita la mochila y la coloca a lado de ella.Johanna sonríe.•Mientras ambas chicas prueban ropa, discuten sobre sí ir a la fiesta. —¿Deberíamos estar en esa fiesta?...—inquiere Johanna mientras se ve frente al espejo con un vestido color negro.—Podríamos escaparnos de aquí e ir... yo también quiero ir a comer—ríe. —Pero además ya son las 11, si llegáramos a ir quizás ya no habría nadie...—Nataly se ve interrumpida por un golpe en la ventana.—Dudo que alguien haya tocado la ventana, esto es segundo piso...—comenta Johanna con un poco de sarcasmo mientras se acerca a la ventana y la abre para verificar que fue lo que la golpeó, pero se lleva la sorpresa de ver a Jacob allí.—Ay, carajo... mi papá nos va matar ahora sí...—agrega Nataly.—Johanna... me escape de la fiesta y pase por aquí... sal a charlar, igual dile a tu hermana que venga...—comenta en voz baja y con entusiasmo.—¡Oye!, ¿qué haces en el jardín de mi casa?—se escucha la voz de Alberto, el padre de ambas.—Genial... vamos—toma a Nataly del brazo y bajan rápidamente.•¡Muchas gracias por leer!—Genial... vamos—toma a Nataly del brazo y bajan rápidamente.Nataly y Johanna bajan rápidamente las escaleras, su padre está afuera con Jacob, abren la puerta y salen al patio.—Papá, tranquilo solo es un chico que vino a querer platicar ya que no me dejaste ir a su fiesta... eso es todo, tranquilo...—se atraviesa en medio de los dos.—Señor, yo solo vine a ver a su hija para charlar ya que ella había dicho que iría a la fiesta, no fue así, pase por aquí y quería saludarla…—Está castigada—responde Alberto.—Lo sé, no era mi intención molestar, solo venía a charlar con ella y eso es todo... me disculpo si llegue de forma inapropiada...—extiende su mano hacia el padre en señal de buena fe.Alberto sonríe y estrecha su mano.—Eso fue fácil...—agrega Nataly con una expresión de sorpresa.—Bien, estaré adentro, solo media hora y nada de irse de aquí—mira a Johanna.Alberto entra a la casa.—Estaré en la habitación, Johanna...—sonríe y se retira, dejando a Johanna sola con Jacob.Johanna
2 semanas después...Febrero se acerca, han pasado dos semanas y Johanna siente sensaciones extrañas, la escuela y su vida han transcurrido, se ha intentado adaptar aunque todo se esté pasando rápido.—¿No me digas que otra ves te sientes mal?—pregunta Nataly, con un poco de molestia pero al mismo tiempo con sarcasmo.—Perdón... no puedo evitarlo—responde mientras se sienta en una banca que está cerca de ellas—Le diré a nuestra madre, te llevará al doctor y te dirá que tienes... llevas dos semanas con mareos y dolores de cabeza, no quiero que te desmayes aquí... necesito ver que ropa compraré y contigo no puedo, te dije que te quedarás en casa pero no hiciste caso—se sienta a lado de ella y deja una bolsa con ropa al lado.—¿Qué tienes?—se acerca Damián y toca su frente. —Tienes un poco de temperatura, será mejor que vayamos a casa—voltea a ver a Nataly.—Está bien, vámonos...—Nataly asiente y acompaña a su hermana.—No, no... yo me iré con tu herma
La cita con el doctor mostró respuestas sobre lo ocurrido con Johanna. Estrés y ansiedad.—No creo que nuestro cambio de cuerpos tenga algo que ver... dudo mucho eso, de igual forma saldremos a caminar por las tardes, eso te ayudará—comenta Nataly después de apagar su teléfono y prepararse para dormir.—Dudo que sea eso, pero llevaré una dieta más saludable, aunque no se cual era mi dieta antes de que yo estuviera en este cuerpo—se acomoda para dormir para meditar sobre su pasado y situación actual.—Está bien, hay que dormir, mañana debemos ir a la escuela. Buenas noches, descansa—entra a la cama y se cubre con la sábana.—Buenas noches, Nataly...Al día siguiente...—Apúrate, se nos hará tarde...—grita Nataly mientras se retoca su maquillaje.—Lo se, voy a tomar mi ropa—Johanna responde y entra a vestirse para ir a la escuela. Un sweater color morado oscuro, un jeanazul marino y unos tenia color morado, junto a su moc
Rápidamente salta del sofá y abre un poco la cortina. En efecto, se percata que está afuera—No, puede ser...Abre la puerta y lo ve ahí de pie, él saluda con la mano y con una sonrisa. Johanna se acerca a él y saluda.—Hola, Ángel... am, ¿y esa... sorpresa de qué hayas venido?—finge una sonrisa. —Pase por aquí y quise visitarte, me preguntaba sí querías ir a comer algo...—se acerca a ella esperando con ansias una repuesta de su parte.—Parece que todo el mundo pasa por aquí—agrega con sarcasmo y ríe. —Y no, no puedo ir contigo, además que estoy cuidando a mi primo—responde con una sonrisa. —Lo sé... si quieres, puedes invitarme a pasar—responde en un tono sarcástico.Johanna frunce el ceño.—Era broma...—sonríe. —¿Qué te parece el sábado?—pregunta entusiasmado e ilusionado—El sábado tengo un compromiso, y dudo que lo cancelen—responde.—Tal vez puede que te cancelen ese compromiso y así podemos salir
Ambas asienten y toman sus cosas, intercambian miradas y avanzan. El director hace un ademán para que ambas salgan y ven afuera a dos oficiales esperando afuera del salón. Johanna y Nataly salen del salón caminando normalmente. Afuera los oficiales les saludan y les piden que continúen caminando hacia la salida.—¿Qué pasa?—susurra Johana.—Estoy tan confundida como tú... es mucha seguras para un simple arresto...—ve a su alrededor y hay más oficiales en la entrada de la escuela, cerca de una patrulla.—Suban, por favor—un oficial abre la puerta del auto.Johanna se detiene antes de subir. —¿Quiere decirnos que está sucediendo? ¿Por qué nos arrestan? Nuestro padre es policía—pregunta con un tono amenazante.—Ya sabemos quien es tu padre, por eso toda esta seguridad. Quieren interrogarlas en la estación, por eso nos enviaron para escoltarlas, por favor suban ya, allá les explicarán que sucede—responde el oficial mientras espera q
Finalmente llega el viernes, un día en el que ambas habían acordado verse con Damián y Karen para ver la nueva temporada de Riverdale, también se enteran que después de que Ángel se declarase culpable y aceptara los cargos, fue sentenciado a 50 años de prision, añadiendo cargos de homicidio, invasión a propiedad privada, acoso, agresión física, portar arma y estar vinculado a ventas de drogas. Inmediatamente fue traslado a prisión.Mientras tanto, del otro lado de la cuidad, Nataly y Johanna esperan a sus amigos. Después de un rato escuchan tocar el timbre de la puerta principal. —Vaya, llegaron pronto...—exclama Nataly, al ver a Damián y Karen en la puerta. Después pasan y se sorprenden al ver a Christian sentado en la sala. Saludan a las chicas y las abrazan, en especial a Johanna, ya que la ven algo apagada.Después Karen y Damián fijan sus miradas en Christian.—Es un primo, lo estamos cuidando por un tiempo—Johanna lo presenta con una sonrisa.—Es como su hijo...—agrega Nataly
—No puede ser...—susurra al ver la foto de un chico parecido al de su antiguo cuerpo.Comienza a revisar el perfil pero la información está de forma “privada”, cierra su laptop y gira en su cama recostándose, mirando el techo.Después de un rato de medicación llega su hermana a la habitación.—¿Estas durmiendo?—pregunta entre risas.—Sí...—responde Johanna en tono sarcástico.Nataly ríe y se intenta acostar.—Oye, descubrí algo—Johanna se voltea un poco y mira a Nataly. Después le señala la laptop.Nataly la ve extrañada, le sorprende como actúa, abre la laptop, desbloquea la pantalla y ve la foto. —¿Que carajos?...—ve la foto del chico. —Eres tú, bueno, técnicamente eras tú... ya que aquí claramente puedo verte, solo que cuando estabas en tu cuerpo de Henry...—Lo sé... pero no entiendo porqué, peor aún, ¿será Johanna, la verdadera, quien está en ese cuerpo?—sugiere Johanna.—No tiene lógica, ya que nos hubiese buscado, vendría a la casa, si es que están en la misma condición que no
—¿Quién es Daniel Cañedo? ¿Y por qué tienes fotos de él?...Ríe. —Veo que por eso tardaste mucho en bajar, ¿revisabas mis cosas eh?—intenta evadir el tema.—Quería curiosear, pero responde mi pregunta...—la ve a los ojos. —Ay ya, no hagas drama; son identificaciones falsas, perfiles falsos que nos pidieron en la escuela, eso es todo...—responde ya un poco desesperada por la mirada incómoda y fija de su novio.—Pero, ¿con fotos?—ríe. —Me parece muy real para ser falso, ¿o que? ¿le robaste la identidad a un chico de internet e imprimiste algunas fotos de él?—sonríe mientras ve cómo Nataly se confunde y baila los ojos ante las preguntas.—¿Pero por qué te molestas?, ¿ocultas algo?—insiste él.—¡No es eso! Pero ya me enfadé que me estés jodiendo con eso, ya te respondí Nicky. Carajo, ¿que más quieres que te diga? Mejor dime que respuesta quieres escuchar y así nos quitamos de problemas...—suspira y mira por la ventana.—Que curioso... que con una simple pregunta te enojaste...—ríe. —¿Seg