TRAVESURA
BALTHAZAR
Pensé que la fiesta de compromiso de mi amigo no se iba a realizar, pero su llamada me sorprendió.
—Espero te hayas traído un traje en esa maleta —me dijo en cuanto descolgue.
Y note dos cosas.
1 Que ya teníamos la señal restaurada
2 Que era mi amigo, Fred.
—Por supuesto que sí.
—Estoy llamando a todos los invitados para confirmar asistencia, pero me dijeron que tuviste un accidente.
—Pueblo chiquito
HABITACIÓNCASSYMe apresuré a mi habitación para ver mi sorpresa y encontré una caja degalda y grande en mi cama, es negra con un lazo color rojo sangre, desate el nudo con cuidado como si se fuera a romper en algún momento, la destape y quite el papel que cubría mi obsequio, dentro había una caja más pequeña y bajo esta un lindo vestido azul oscuro.Tomé la caja más pequeña de terciopelo blanco, era del tamaño de mi mano con un sello en medio de la tapa que denotaba lo exclusivo y un broche para abrir la caja de oro, abrí la caja y una a delicada cadena de oro brillaba, lo mire adombrada y la saque de su estuche, era larga por lo que quedaría en medio de mis pechos, al final de esta tenía una especie de diamante blanco que brillaba sin cesar, no creo que sea de circonio. Dejé la cadena de nuevo en su estuche y fui por el vestido, era muy bonito, de encaje con una tela de trasfondo del mismo color del vestido.Lo alcé por encima de mi cabeza para admirarlo y se veía hermoso, corrí a
EL DUQUE BALTHAZAR Llegamos en pleno apogeo de la fiesta, y es que eso tiene las fiestas en medio de las highlands, sabemos divertirnos, hay un Dj en la esquina, una tarima para lo que supongo es para música en vivo más tarde, hay unas pocas mesas altas en unas carpas y algunas sillas al aire libre, la gente está desperdigadas por el lugar, la mayoría de la grama está cubierta con una lona para que puedan caminar sin ensuciar sus zapatos. El castillo de Fred queda algo retirado de la hacienda, y sí. Dije castillo. Mi buen amigo Fred es duque y dueño del castillo Durobin, es uno de los más ricos del condado, pero tiene un alma pura, además estudiamos juntos. —¡Vaya! —exclama Cassy— un castillo. —Sí, él no lo dice mucho, pero es un duque y su esposa es la futura duquesa. —Duque, mira nada más —suelta un silbido de apreciación —bueno, pero como los vi en un restaurante pensé... —El restaurante es de ella, lo compró con mucho esfuerzo, se conocieron allí y el ama ayudarla —explique
CASTILLO CASSY Veo el castillo y me maravillo por tan hermoso lugar, sabía que los amigos de Balthi son de nivel adquisitivo alto, pero no sabía que era amigo de un Duque. La noche se veía muy bonita llena de muchas estrellas, las carpas tenían. La gente más estirada, pero fuera de esta estaban bailando y bebiendo los demás, y los más jóvenes. Cuando vi tensión en el ambiente me llevé a Iliana a la barra. —Gracias por eso —me dice bebiendo un vaso lleno de whisky casi sin respirar. —¡Si que tenías sed! —exclame riendo y pidiendo otra bebida afrutada. —No te he visto tomar whisky desde que llegaste —me dice Iliana. —No me gusta —susurre —es muy fuerte para mí gusto, se que es un sacrilegio pero una amiga viajo a México y me regalo una botella de tequila —le informé —la amé, me gustaría mucho viajar a ese país, solo he viajado en mi mente. —¿Te gusta leer? —preguntó sorprendida. —Sí, es un buen pasatiempo cuando la hacienda me deja un espacio. —Yo también leo, pero como no me
HURACÁNCAMILONo me gusta esta clase de fiestas y alboroto, no me gusta la multitud, prefiero un whisky con mis amigos en un lugar tranquilo o en la soledad de mi casa, mi gemelo es todo lo contrario, siempre a sido el más sociable de los dos.Ahora me veo arrastrado por un huracán de locura con hermosas curvas, su cabello se mueve al viento, sus ojos brillan con diversión, me dijo que era latina, su madre y ellas llegan a Escocia desde Venezuela para un nuevo comienzo hace muchos años.—Vamos, pie derecho adelante, pie izquierdo atrás y mueve las caderas, muñeco —me guiaba la mujer de pelo azabache y rizado.La vi a los ojos y estos brillaron con diversión y alegría así que me deje guiar, tal vez no haría daño una simple clase de baile ¿cierto?La pisé tres veces más entre tantos tropiezos y ella jamás se quejó o dejó de intentar que yo aprendiera, era insistente y tenaz se lo concedía. En ese momento se quitó la música rápida y vino una lenta así que fue más fácil simplemente poner
ESCAPEBALTHAZAREstábamos por irnos cuando nos abordo un grupo de ancianos y frenaron nuestra huida.¡Genial!—Hace mucho que no te veíamos por estas tierras muchacho— me alaba una de las viejas amigas de mi madre.—Casi no te reconozco —añadió otra —sino es porque te pareces a tu padre y esos ojos de tu madre, no creería que eres el mismísimo Balthazar Lennox.—Estaba muy ocupado, mi padre también está en la hacienda.—Mañana le haremos una visita, si no es molestia claro—añadió una señora muy coqueta.Cass mordía sus regordetes labios para no reír por como la mujer que me doblaba la edad me estaba coqueteando.—Por supuesto, mi padre y su esposa estarán encantados de recibirlos —les lancé ese balde de agua fría —yo no sé si estaré, es que cuando uno está de novios poco tiempo le queda.Agarré la mano de Cassy y la besé, las mujeres celebraron con gran júbilo nuestra unión, intentamos media hora después volver a irnos, pero las ancianas volvieron al ataque con el ritual que siempre s
JACUZZIBALTHAZARNo se porque lo dije, simplemente me dejé llevar, no quiero retractarme de lo que dije así que no se que hacer para que ella vuelva a moverse, simplemente no parpadea y parece que no respira.—Yo... Yo— comencé a balbucear mis manos sudaban de los nervios.De repente de abalanzó encima de mí y sus labios conectaron con los míos y olvidé mi nombre, gruñi en su boca y apreté sus caderas nuevamente y la subí a horcajadas en mi cuerpo.Se contoneo encima de mi polla y esta se engroso más en agradecimiento por sus atenciones, la bajé de nuevo y sin despegar mis labios de los suyos quite mi pantalón y ella me ayudó a bajarlos más rápidos, se que esta distrayendome para no contestarme, pero no importa. Se que le importo, tal vez aún no me ame, pero vi su cara de preocupación cuando me encontró herido.Espero no estar imaginando cosas.Dejé que me besara por mi clavícula y fue bajando poco a poco hast encontrarse con mi miembro salvando por ella, mido dos metros de altura y
WORKAHOLICCASSYLe dije que sentía lo mismo que él, tiene razón nadie debe decirnos como sentir o cuando es correcto querer. Me aterra, pero lo hice de todas formas, él siempre ha sido muy sincero conmigo porque no serlo con yo con él.Me sentía un tanto extraña despertar al lado de alguien más en la cama, solo había dormido con Phoebe en algunas ocasiones, pero despertar con Balth era algo nuevo, sentir el cómodo calor que irradia su cuerpo y como nos almoldamos el uno al otro sin entorpecer nuestro espacio, su mano la tiene encima de mí estómago y sus piernas rozan las mías sin llegar a invadir del todo mi espacio, trato de no moverme o alterar mi respiración para que el descanse mucho más.—Se que estas despierta —dice con esa voz ronca y sexy de recién despierto que acelera mi pulso.—Desde hace un rato —admití sintiendo mis mejillas calentar.El aceleraba mis neuronas y hacía vibrar mi ser, alborota a cada hormona de mi cuerpo, era difícil no reaccionar a su voz y no hablemos de
¿ÉL O ELLA?CASSYTodos quedamos en silencio y sorprendidos cuando un hermoso cabello dorado es liberado de los confines del casco, empecé a detallarla un poco más y bajo toda esa ropa ancha se encontraba la moldura de unos escondidos senos, su cara era pequeña y fina, de grandes ojos verdes, nariz pequeña y boca voluptuosa.—Lo siento mucho —sale una pequeña voz agradable y preocupada —no me dio tiempo a frenar, lo lamento.—Yo... Y-yo— Michael comenzó a balbucear mientras veía unos bonitos ojos verdes preocupados.—Está bien, estaban esperándonos —dije tratando de tapar que todos se quedaron callados —me llamó Cassy, mucho gusto.Extendí mi mano y ella la aceptó enseguida y solto aire que al parecer estaba reteniendo.—Sí quieres podemos ir al hospital —intentó arreglar la situación nuevamente.—Estoy bien— carraspeo Michael volviendo en sí —¿quieres que te llevemos al hospital a ti?—No, gracias —se disculpó mientras recogía su cabello nuevamente y lo volvía a meter dentro del casc