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Punto de vista de Ara.

A la mañana siguiente me levanté temprano. Después de darme una ducha rápida, me puse una ropa nueva y me dirigí a la cocina.

Busqué los ingredientes y comencé a preparar el desayuno para Jason y para mí.

Puse la mesa cuando él bajó las escaleras vistiendo su ropa informal. Llevaba una camisa holgada con sudadera. Tenía el pelo revuelto y mojado.

“Se ve un poco lindo”, reflexionó Imara y la regañé en mi cabeza.

—El desayuno está listo —le dediqué una sonrisa mientras tomaba asiento frente al mío y se servía él mismo.

Comenzamos a desayunar mientras yo reflexionaba sobre mis pensamientos. He estado pensando en ello últimamente pero aún no lo he expresado.

—Jason —lo llamé, llamando su atención.

—Pensé que viviría aquí sólo unos días, pero ahora parece que será mucho tiempo —murmuré mientras él solo me miraba fijamente y seguí hablando—. Me gustaría pagarte el alquiler, tengo algunos ahorros aquí —le dije pasándole un sobre en el que había algunos billetes que