La escucho jadear en mi oído cuando roso la piel de su clavícula con mi lengua y luego dejo un pequeño y suave mordisco sobre ella, continuo mi exploración dejando besos en cada centímetro de su piel, hasta alcanzar el borde de su blusa, acuno sus pechos entre mis manos, su espalda se arquea y no puedo evitar sonreír, sus ojos están cerrados y su labio inferior está atrapado entre sus dientes.

– Eres perfecta Nisha – susurro antes de morder uno de sus pechos sobre la tela.

Deslizo mis manos dentro de la blusa y acaricio con cuidado su piel, alcanzando el borde inferior de sus pechos, los cuales roso antes de tomarlos por completo, mientras continuo repartiendo besos en su abdomen, ella jadea y arquea su cuerpo para evitar perder contacto con mi boca y sonrió. Está disfrutando de esto, por primera vez después de tanto tiempo, no está pensando en lo que vivió.

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