David

Cuando le pedí a Victoria salir conmigo la verdad no tenía planeado nada, busque lugares impresionantes en dónde llevarla, soy malo para esto.

Nunca he querido impresionar a nadie y al ser una figura pública es difícil conseguir lugares donde no estemos expuestos.

Paso toda la tarde buscando lugares hasta que consigo un lugar increíble, la verdad nunca me había pasado esto, ganas inimaginables de estar con alguien y no solo en el plano sexual, que lo admitiré claro que quiero repetir mil veces.

Cada vez que estoy dentro de ella me vuelvo más adicto, muchos piensan que probando la fruta prohibida se te quitarán las ganas y es la mentira más grande del mundo.

Cuando la comes quieres seguir comiendo.

Con la sola presencia de esa mujer, mi cuerpo reacciona, es algo que es nuevo para mí.

No soy un santo en el transcurso de mi vida he estado con varias mujeres, pero ninguna ha causado algo más que atracción.

Pero desde que puse mis ojos en esa hermosa rubia de ojos ámbar, mi cabeza so