Layla llevó a Robert ante Eric y lo invitó entusiasmada: "Tío Eric, mis padres se van de luna de miel. ¡¿Por qué no vienes a jugar a nuestra casa?! Me pareció que habías dicho que no volverías a trabajar hasta después de Navidad. Tenemos tres días de vacaciones por Navidad, ¡así que deberías quedarte dos días más!".

Eric se lo pensó y dijo: "Tengo que preguntárselo a tu madre".

"¡Está bien! Mis padres se van, ¡así que yo hago las llamadas en nuestra casa!", dijo ella engreídamente. "¡Se van esta noche, así que puedes ir hoy mismo! ¡Je, je, je!".

Eric no pudo evitar reírse ante su actitud.

Robert levantó la vista y la corrigió: "Layla, Hayden ya ha vuelto. Si mamá y papá no están, deberíamos hacerle caso a Hayden".

Para Robert, aunque Layla era extremadamente importante, seguía pensando que Hayden era mucho más fiable.

"¡Hayden también me escucha!", dijo orgullosa. "Me dejará hacer cualquier cosa porque le caigo bien. Lo mismo pasa contigo".

Robert asintió obedientemente. "Claro