En el aeropuerto, Mike llevó a Layla y a Hayden a recogerlos.

"Si mami supiera que Robert está enfermo, seguro que se le rompería el corazón", murmuró Layla.

Robert había tenido fiebre la noche anterior. Había tomado un medicamento para la fiebre. La temperatura bajó, pero volvió a subir al cabo de unas horas.

Robert había nacido prematuro. Su cuerpo era algo más débil que el de otros niños normales.

"Ya no tiene fiebre, ¿verdad? Es solo un resfriado. Su madre es médica. No se asustará por esto", dijo Mike.

"¡Pero la voz de Robert está tan ronca como la de un pato!". Cuando Layla pensó en lo ronca que estaba la voz de Robert en ese momento, no pudo evitar las ganas de reír.

Mientras charlaban, Elliot y Avery se acercaron.

"¿De qué están hablando? Los hemos visto reír desde lejos". Avery se acercó a Layla y le dio una palmadita en la cabeza. "Ya es muy tarde, ¿por qué no estás en casa descansando?".

"Estoy de vacaciones de invierno. No necesito levantarme temprano mañana. Hayde